POV Nayeon
Mina no paraba de besar mis zonas que apenas sabía que eran muy sensibles, causando que mordiera mi labio inferior para retener los sonidos de satisfacción que me estaba provocando.
No me dejaba pensar bien acerca de lo que había dicho.
Porque lo dijo ¿Verdad? Estoy segura que lo dijo y no estoy loca.
Puedo estar excitada, ¡Pero no loca!
Mi cuerpo no paraba de removerse debajo del suyo, y su risa ronca calaba muy dentro de mi, causando muchos estragos en mi cuerpo sensible.
—Mina... no podemos... —suspiré sobre su boca que ya estaba sobre la mia, mordiendo mi labio inferior hasta chuparlo. Dejando un sonido obsceno que vibró por todo mi cuerpo.
Esto estaba pasando los límites. Cuando nos besabamos, jamás pasaba esto que estaba sintiendo, al menos no con tanta intensidad de que hacerlo sin importar las consecuencias.
Además, su boca anteriormente no buscaba mis zonas erógenas como lo hace desde hace minutos.
Estabamos en el estacionamiento de la prepa y alguien podría acercarse a ver qué pasaba si nos vieron salir hace bastante de la cafetería.
—¿Quien lo dice? Podemos darnos el placer que tanto nos piden nuestros cuerpos en este momento... —mordió mi clavícula, y esta vez sus manos empezaron a tomar vida sobre mi, tratando de romper la racionalidad que me quedaba.
Si es que la tenía.
—Somos hermanas, tonta...
—¿Y?... nuestra sangre tiene diferente ADN, Nayeon. —no me dejó terminar, solo producía sonidos eróticos que incitaban a excitarme más.
Tragué duro porque mi cuerpo estaba respondiendo al contacto de sus manos, arqueándose para que siguiera y tuve que gemir cuando se metieron debajo de mi camisa.
'Piensa... piensa, Nayeon. Borra la excitación con la biblia', pensé rápidamente, pero quedó nublado cuando atrapó mis pechos y apretó mis pezones hasta hacer que soltara un gemido de mi garganta.
—Ahh-Unnie... Para... —traté de detenerla con mis manos pero ella seguía estrujando mis pechos, a pesar de mis inútiles intentos.
—Gimes demasiado bien para obedecer, Nayeon.
Mi cara estaba ardiendo ante la calentura que la invadía. ¿Como mi cuerpo estaba reaccionando demasiado bien con las caricias de quien es como mi hermana? ¡Es demasiado indebido!
Sus labios se encontraron nuevamente con los míos, y llevaron un ritmo que no mejoraba para nada nuestra situación burbujeante de placer. Los chasquidos que nuestros labios soltaban sonaban demasiado bien, y yo no quería dejar de besar esa boca que me proporcionaba muchas sensaciones placenteras, pero iba a morir por falta de aire si no me alejaba.
—Nayeon, tomalo como un juego entretenido... Dios —masculló dejando besos cortos en mi boca— No puedes negar que quieres que bese esos labios que se sitúan entre tus piernas.
El humo podía sentir como salía de mi cabeza, y la sangre salió de mi nariz otra vez, haciendo que Mina se quitará sobre mi e hiciera que inclinara mi cabeza para no morir desangrada mientras tomaba algo para limpiar mi nariz.
¡Demonios! Mi pobre corazón golpeaba tan fuerte que sentía que mi pecho no iba a resistir por mucho tiempo si no libera esa presión de mi vientre bajo. Mi vagina estaba palpitando desde que susurro en mi oído.
No estuvo bien que imaginara tenerla entre mis piernas, comiéndose toda la humedad que ella me había provocado.
Tener un sangrado nasal dos veces por culpa de mi imaginación... Es muy pervertido de mi parte.

ESTÁS LEYENDO
Indebido | Minayeon
FanfictionTodo iba bien, aún cuando tenían sus diferencias por sus padres... su querencia jamás llegó a otro extremo... a otro sentimiento que no fuese familiar. Todo para ellas era normal y nada que fuese algo del otro mundo. ¿Como fue que cambió de algo nor...