Cascada del Universo (Itanaru)

Capítulo 8

Itachi veía con cuidado al rubio -¿Qué planeas Naruto? -el pequeño lo vio con cuidado, giró su mirada viendo a la alianza a la defensiva contra él, podía ver miedo, los apuntó con el rostro viendo a Itachi -¿Ahora entiendes lo que te dije? ¿ahora me crees? -Itachi con duda giró su mirada, era obvio que le temían y esperaban atacar, someterlo, ¿acababa de salvar sus vidas y así le pagaban? -Naruto, cálmate, sólo queremos hablar -el Uzumaki vio a Kakashi con frialdad -¿cómo aquella vez que me sometieron y me enviaron a la presión de sangre por un crímen que no cometí? -abrieron sus ojos bastante -era una misión Naruto, si te decíamos, había riesgo de que fueras descubierto -el rubio hizo brillar sus ojos en rojo, gritó con coraje -¿dejaron que me golpearan y que me tocaran sexualmente por una misión? -abrieron sus ojos bastante. Tsunade y Kakashi lo vieron con terror -¿de qué hablas?, había shinobis ocultos cuidándote -Naruto los vio como estúpidos -no había nadie Hokage-sama, no había nadie cuidándome el trasero-

La rubia intentó acercarse, pero Naruto con su pie golpeó el suelo, creó un terremoto, una enorme grieta que lo dividía a él y al Uchiha del mundo -Naruto por favor escúchame, nunca quise que eso sucediera, sólo platiquemos, ¿quieres? -el Uzumaki apretó el ceño -¿quiere hablar de cómo usaron mi herencia para levantar Konoha? ¿o de cómo he sufrido hambre toda mi vida? ¿De todas las veces que me han lastimado? ¿de cómo arriesgue mi trasero todos estos años por todos para nada?, eso les importó poco, ni siquiera tengo un techo donde vivir -ahora entendían su coraje.

-Naruto, ven aquí, lo hablaremos en Konoha, todo se arreglará, te lo prometo, todo cambiará -el rubio bajó su guardia lentamente al escuchar a su abuela, podía ver que era sincera -no la escuches cachorro, quieren engañarte -el rubio apretó el ceño de nueva cuenta, el zorro tenía razón, no podía volver a la misma mierda, recordó aquella cascada con vidas mejores que la suya, la envidia lo cubrió por completo, no tenía nada de eso que tanto deseaba, amor, felicidad, paz, sus padres, su Ero-sennin. Observó a Sasuke correr hacia Itachi, apretó el ceño ¡no!, sí él no era feliz, ese bastardo que lo lastimó tanto tampoco sería, levantó sus dedos liberando el alma del Uchiha.

Sasuke abrió sus ojos demasiado viendo caer el cuerpo sacrificio del Edo tensei de su hermano -¿por qué maldito? -corrió tratando de atrapar a Itachi, pero este comenzó a desaparecer observando la mirada fría del Uzumaki, giró hacia su hermano con una suave sonrisa -lo lamento Sasuke -desapareció en la nada, el Uchiha menor comenzó a llorar de frustración perdiendo la cordura -malditoooooo, te matareeeee -se lanzó sobre el rubio, pero este lo capturó con sus cadenas con gran facilidad, lo estrelló en el suelo algunas veces humillándolo al hacerlo ver débil -aaaaaahhh -absorbió su chakra dejándolo desmayado, lo lanzó a los pies del Raikage, el gigante lo vio con duda, sonrió con soberbia al aceptar su regalo, Sasuke pagaría en kumo su crímen, atacar al Raikage y al jinchuriki del Hachibi.

Kakashi y Sakura vieron con terror a Naruto -¿Cómo te atreves Naruto?, eres un desgraciado -la pelirrosa corrió cabreada con su puño en alto cargado de chakra, brincó la enorme grieta y trató de atacar al Uzumaki, pero Kakashi alcanzó a detenerla, su generación se paró junto a la Hokage que lo veía con dolor -¿Naruto? -el rubio giró su mirada observando a Shikamaru y al resto -¿podemos hablar rubio? -el pequeño observó al Nara, pudo sentir el chakra de su padre desaparecer cuando iba en camino al campo de guerra, mordió su mejilla con pena, quería consolarlo un poco, pero todo se había roto, algunos de sus últimos clones reventaron, las memorias de la muerte de los consejeros y de algunos aldeanos en Konoha regresaron a él, su clon se había divertido cobrando venganza, no había manera de dar marcha atrás, si por error los escuchaba, lo capturarían, ya sea por sus actos o por miedo a su poder, lo sabía, giró sus gemas con dolor a la Senju -Ero-sennin trabajo por mucho, lo dio todo, no permitas que su deseo de paz muera -

Tsunade lo vio con duda -entonces, regresa y ayúdame a lograrlo -Naruto negó con dolor -ya es tarde -la rubia negó con desesperación -no, no lo es, aún es tiempo, sólo debes venir a mí -el rubio abrió un portal con su nuevo poder, había una cascada al fondo color negro, lágrimas caían de sus ojos. La rubia negó al reconocer el lugar de historias de katsuyo. Naruto giró su mirada a la que una vez llamó su familia, con la mirada se despidió, caminó lentamente hacia el portal observando las distintas dimensiones en la cascada, se dejó caer al agua, el portal se cerró. Tsunade se dejó caer sobre sus piernas derrotada, cerró sus ojos con dolor -te fallé Jiraiya -guardaron un silencio incómodo, los kages se acercaron.

-Demonios, ¿Qué era esa cascada Kakashi-sensei? -preguntó Shikamaru con curiosidad armando una estrategia para buscar a su amigo, el peliplata negó -debemos buscarlo Tsunade, no podemos dejarlo libre, sigue siendo una amenaza -la rubia volteó cabreada viendo al anciano Tsuchikage -¿no tuviste suficiente?, pueden estar felices, mi niño no sólo se fue, se largó de este maldito mundo -abrieron sus ojos bastante. Gaara preguntó preocupado -¿de qué habla Tsunade-san? -la rubia bajó su mirada -la cascada dónde se lanzó, es la cascada del universo, salió de esta dimensión -abrieron sus ojos demasiado -¿mis bijus? ¿cómo lo encontraremos? ¿dónde se encuentra esa dichosa cascada? -Tsunade lo vio con coraje -en el mundo de las invocaciones, es imposible llegar y si lo hicieras, existen miles de dimensiones, no hay garantía de regreso, es todo, lo perdimos y con él, a las bestias -guardaron silencio.

Tsunade caminó hacia su gente -recojan a nuestra gente, usen los pergaminos y guarden sus cuerpos, aquí todo terminó -asintieron, distintos grupos de shinobis llegaron contando historias de cómo Naruto los había salvado del Edo tensei y de los Zetsus, la generación y Kakashi escuchaban con dolor. El peliplata levantó el rostro ocultando sus lágrimas, había hecho todo mal.