Cascada del Universo (Itanaru)

Capítulo 31

-Ya no puedes ocultarlo Naruto, vi al soltero más cotizado de toda la aldea salir de tu casa esta mañana, vamos, cuéntame -el rubio sonrió ligero, la chica constantemente iba a su librería a investigar quién era el caballero que le había enviado tantas flores, era algo poco normal en Konoha -Ino, eres una chismosa -la Yamanaka sonrió con diversión -oye, eso se escucha bastante feo, me gusta llamarlo información oportuna -ambos sonrieron con diversión -rubios problemáticos, sólo cuéntale o joderá a diario -Naruto levantó sus cejas siendo coqueto -estoy seguro que en cuanto lo diga, media Konoha lo sabrá -Ino sonrió con emoción -media Konoha ya lo sabe mi querido Naruto, esta mañana dos o tres señoras vieron al heredero Uchiha salir de la casa junto a la librería peinando su cabello en un estado bastante sensual, ya sabes, dos o tres músculos se veían cuando levantó sus brazos, lo que quiero son los detalles-

Naruto levantó un puchero al verla escurriendo saliva -bastarda, estás hablando de mi novio -Shikamaru negó con diversión -cuéntanos, ¿ya sabe su clan? -el rubio vio al genio con fastidio, asintió -su familia es quién sabe, sus papás no están de acuerdo. Shisui me aceptó desde el inicio, el menor, no tengo idea, no pude distinguir si me rechazaba. Al parecer los patriarcas esperaban un compromiso político con Menma Namikaze, después de que dijo que era un simple aldeano, supongo toda oportunidad de agradarles quedó atrás, me exalté un poco -Ino abrió sus ojos bastante al recordar -es verdad, desde niños Menma ama a Itachi-san, siempre ha pregonado que sería su pareja, pero en el amor nadie manda, nunca vi un gramo de interés de Itachi-san en él -Shikamaru rascó su nuca con fastidio -Menma no es mal chico, sólo está bastante mimado y piensa que el chico es suyo, al final debe aceptar que es un capricho suyo y dejar ir el sentimiento -Naruto sonrió ligero -es verdad, tal vez en un futuro podamos ser amigos, me agrada, es divertido y le gusta el ramen -el rubio les sirvió un poco de café rellenando sus tazas.

-De hecho, aunque te duela Ino, yo siempre he creído que Sasuke tiene sentimientos por Menma, esto es problemático -Ino abrió bastante sus ojos, mordió su mejilla, en distintas ocasiones la idea le había cruzado por su cabeza. Naruto abrió sus labios en una enorme o en sorpresa, Sasuke era bastante mierda en su mundo, al parecer con familia era distinto, giró su mirada a la Yamanaka esperando una reacción, se veía algo ensimismada. El Nara veía con pesar a la chica -en mi humilde opinión rubia, Sasuke no es para ti, hay muchos más que babean por ese largo cabello rubio problemática -el Nara sonrió ligero, el menor sonrió del mismo al ver a ambos, sacó un botecito con galletas y las puso en sus platos -¿de qué hablas?, nunca nadie me ha dicho que le guste -el genio negó -¿cómo esperas que te digan, si todo el tiempo hablas del dichoso Sasuke-kun igual que la psicópata de tu amiga?, eres distinta Ino, deberías comenzar a pensar en ti y ver a tu alrededor-

Naruto comió con calma galletitas observando a ambos, había tensión -eso es verdad, cuando llegué, el bastardo de mi novio comenzó su acecho, un día me enteré que Menma amaba a Itachi, yo siempre había pensado en el bienestar de los demás, nunca en mi felicidad, me hicieron ver que era un idiota y que debía ser un poco egoísta de vez en cuando, si a mí me gustaba y yo le gustaba, era lo que debía importar -Ino sonrió quedito con algo de envidia -vamos Naru, el sujeto llegó con cientos de flores, dulces, palabras bonitas, yo no tengo eso -tomó su cabello y lo peinó lentamente con algo de tristeza, el rubio giró su mirada al Nara que la veía con atención, levantó un puchero, lo pateó bajo la mesa, abrió sus ojos e hizo una seña con su quijada mostrando la tristeza de la chica, el genio había sido descubierto, volteó los ojos con fastidio.

-Vamos rubia, tienes una florería, ¿por qué alguien llegaría con flores para ti? -Ino apretó el ceño -porque me gustan genio, por eso vivo entre flores, pueden comprarlas en mi puesto y entregarlas, es válido y se hace negocio -Naruto y Shikamaru sonrieron con diversión al verla más relajada -rubio, traele un pastel a Ino, tal vez así se calme -la Yamanaka infló su mejilla -¿cómo me voy a calmar si acabo de darme cuenta que he sido derrotada y ni las moscas se me paran? -el Nara volteó los ojos con fastidio, recibió el pastel y cortó un poco de él, levantó su cuchara y la metió en la boca de la Yamanaka -el azúcar sube el ánimo, anda come problemática -Naruto se escabulló hacia el mostrador dejando a ambos, esperaba que Ino se diera cuenta de los sentimientos del Nara, se sintió agradable conversar con ambos, al parecer ya tenía amigos.