¿Cuanto vale tu imagen ante las personas?
Es una pregunta que siempre se repetía Satoru Gojo, y es que para él los comentarios de los demás era mucho más pesado.
Y se sentía enfermo por comenzar a sentir sentimientos amorosos por un Omega marcado.
E...
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Hoy era la cita con Yuji y estaba nervioso.
¿Qué tal si el lugar no le gustaba al Omega?, o se arrepentía de último momento.
Mi ansiedad me comía por dentro.
Yo estaba casi listo, tan solo debía de ponerme mi chaqueta encima de un chaleco color blanco, tenia mis jeans negros y mis zapatos del mismo color. Me eche una colonia para no oler mal y salí de mi cuarto.
Revise mi celular por si tenia algún mensaje del Omega, pero no había nada. Tan solo uno del día anterior donde me deseaba buena noche.
Baje hasta la sala donde mi papá quedó muy sorprendido.
- Ow, mi bebé se ve tan guapo, y-y c-crece tan r-rápido...- Menciono sacando unas finas lágrimas de su ojo.- Te ira bien, Satoru, y si no pues aquí habrá chocolate caliente para las penas.
- O chocolate caliente de la victoria.- Dijo el viejo pasándome las llaves de Jeep.- Lo vas a impresionar, hijo, por algo eres mi orgullo.
- Gracias viejo, gracias papá.
Mi teléfono sonó dando la alerta de que me había llegado un mensaje, era del Omega diciendo que estaría listo en diez minutos. Así que esa fue mi luz verde para ir a su casa y buscarlo.
Me despedí de mis padres y afuera estaba mi precioso vehículo esperando.
Me subí a el y Nanami me dijo que condujera con precaución y que el GPS estará activo por si llega a pasar algo. Le dije que no se preocupara y, finalmente, encendí el motor saliendo de mi residencia.
Puse el mapa en la pantalla que tenia el Jeep y marque la dirección del Omega, estaba a unos veinte minutos y el trafico era bueno. Cuando llegue aparque frente a su casa y me baje para tocar su puerta.
Pensé que sería el Omega el que abriera, pero fue su hermano adoptivo quien me recibió.
- Lo quiero a las nueve de la noche en la casa y ni un minuto más.- Dijo en el tono más amenazante posible.- Y si me entero que le hiciste algo indecente a mi hermanito, eres Alfa muerto, ¿Oíste?- Asenti lentamente, ¿acaso en las primeras citas pasaban otras cosas?
- Ya me voy, Choso-nii, volveré más tarde.- Dijo el Omega apareciendo de un costado de su hermano, a simple vista él traía puesto uno de estos polerones con gorra de color beige, unos jeans negros y zapatillas blancas, en sus manos tenia dos vasos con pajilla y un liquido espeso de color chocolate.
- Yuji, cuídate mucho y eche en tu bolso un gas pimienta por si se pasa de listo este Alfa.
- Gracia, pero no creo que sea necesario. Nos vemos después.- Se despidió de su hermano y me tendió uno de los vasos.- Le hice un frapuccino, sempai.
- Gracias, espero que no te moleste ir en auto.- La verdad es que no sabía tomar el transporte publico, y no tenía ni idea de como llegar al lugar que quería ir.
