Año 13
10Ka, 50Ma.
Bajo Balgüim.El poder de las sombras que poseía Jasper no solo se concentraba en lo parcial de la comúnmente llamada por los humanos "umbrakinesis". El poder del hijo de Dlor también era intangible, y lo evidenció en la petición que le cumplió a Maya.
Ella quería olvidar. Él lo haría posible.
Jasper llevó a Maya unos metros más allá de Lofer, los alces y el carruaje, necesitaba que estuvieran solos. Era un terreno llano, la nieve seguía en todas las direcciones hasta topar con árboles ceñidos y altos que rodeaban los senderos principales.
—Siento que la temperatura es más baja en este sitio —dijo ella frotándose los brazos.
Jasper no dilató su primer impulso cuando las alas se le abrieron y rodearon a la joven. Maya se quedó estática, mirando esos ojos tan negros y profundos que ahora escondían algo nuevo. Porque en el pasado ella había advertido tristeza, dolor y valentía, pero existía esto pesado que... lo atormentaba ¿Qué podía ser?
—Gracias —dijo ella sintiendo que el calor brindado por las alas combatía muy bien el frío.
—No me des las gracias —respondió seco Jasper.
Maya apretó los labios, afligida porque él fuese tan estricto en dejarle paso a la gratitud, la felicidad y a los sentimientos positivos en general. Pero en realidad Jasper lo había dicho porque la culpa le iba creciendo cada segundo más y más; por lo que haría, por la intromisión a la mente de Maya Alonso... Él se había prometido que nunca usaría ese aspecto de su poder, y reafirmó la promesa cuando Dlor entró a su mente y le desbarató varios de los recuerdos que tenía de su infancia en Rumania. El dolor, la violación de privacidad, el estado de humillación... Un aspecto demasiado nocivo y cruel del poder que compartían, un aspecto que no debía ser usado bajo ningún concepto.
Y ahí estaba él, a punto de ponerlo en práctica con Maya.
Le debía toda la sinceridad posible.
—Voy a entrar en tu mente Maya. Buscaré el recuerdo de lo que viste y lo romperé. Como ha sido reciente, no estará vagando lejos y no tendré que demorarme mucho.
—De acuerdo —aceptó ella mirándolo alentada, como si fuera su único soporte estable en medio de un terremoto.
La culpa aumentó tanto que Jasper cerró más las alas en derredor. No merecía esa mirada... Él no era un salvador, sino una bestia con una habilidad muy cruel.
«No me mires así, Maya»
La propia expresión de Jasper era sepulcral, como si estuviera a punto de enterrar un cadáver.
—Cuando termine, no vas a recordar el porqué estamos aquí, en medio de la nada. Deberé decirte cualquier... —Jasper se detuvo.
De todas las cosas que odiaba, esta era de las peores.
—Permiso concedido para mentirme —concluyó Maya para demostrarle que no había problema.
—Cierra los ojos —le ordenó.
Ella lo hizo y entonces, se dio inicio al proceso. El príncipe partía de lo básico para este tipo de trabajo, que era atravesar el campo energético que rodeaba al contrario. Todos los seres contaban con uno, y era tarea sencilla para Jasper atravesarlo. Pero para entrar en los recuerdos debía alimentarse de la esencia del ser, usarlo como llave para todas las paredes psicológicas que existieran, algunas eran más abundantes según la personalidad. Maya no tenía muchas construidas y Jasper se incomodó de que alguien como ella fuera por la vida sin desconfianza. Fue fácil absorber su campo.
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LEGENDARIOS3️⃣ENTRE LAS GARRAS DE UNA BESTIA
Fantasy3️⃣ ⚜TERCER LIBRO DE LA SAGA LEGENDARIOS⚜ La belleza es poderosa, pero una buena dama conoce el peligro que se esconde detrás de la belleza. Y ahora el peligro es una bestia, convertida, forjada por el poder de las estrellas en algo que no era. Si a...