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CHAPTER THIRTY-NINE
❝NAOMI❞

CHAPTER THIRTY-NINE ❝NAOMI❞

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Tom Kaulitz.

Gustav, quien observó y escuchó todo desde la puerta se acerca dando grandes zancadas hacia mí. Su rostro luce serio.

─Si tuviera que haber un rey de los idiota, sin dudas serias tú.─ escupe, apretando sus labios en una lnea recta.

─Es lo mejor.─ murmuro, dando pesadas respiraciones.

─¿Lo mejor?─ Rie amargamente
─Si no fuera por ella ahora tú y Bill estarían muertos.─

─Si no fuera por ella, yo no estaría
aquí.─ gruño.

─¿En serio crees que me voy a creer toda esa mierda que le has dicho?─

─¿Por qué no lo harías? Es la verdad.─ él niega.

─Sabias que ella estaba con Bill, y aun así te metiste. Desafiaste a Bill por ella..porque la amas.─

─Y porque la amo, es mejor que
estemos separados.─ Admito,
tragando con fuerza.

─Eso es lo más estúpido que puedo
escuchar.─ niega seguidas veces. ─El tipo se escapó y apuñalo a Bill, el tipo está siendo buscado, y lo encontraran, siempre los encuentran. Los otros dos están jodidamente muertos. ¿A qué le temes?─

─No quiero que le hagan lo mismo
a ella.─ murmuro, en voz baja. ─Desde que entre en su vida solo he
causado problemas. Merece encontrar a alguien más que no tenga un amigo que quiera destruir su felicidad.─

─¿Piensas dejarle el camino libre a
otro?─ espeta con enojo. ─¿Enserio Tom? ¿Después de todo?─

─Es lo mejor.─

─¿Te das cuenta que acabas de quebrarla con todas tus estúpidas palabras? Ella no buscará a nadie más. Ella te ama a ti.─

─Tiene que hacerlo, ahora ella piensa que yo ya no la amo más, le va a hacer más sencillo olvidarme─

─Eres un idiota.─ masculla, saliendo de la habitación.

Lo sabía, sabía que era una idiota.











Hazel Beckett.

¿Alguna vez algo te dolió tanto que la tristeza no cabe en tu cuerpo? ¿Cómo desaparece ese ardor que te
quema el estómago?

Nada había funcionado. Había pasado una semana. Una semana que solo sabía sobre el mejoramiento de cada uno, debido a las llamadas de mis amigos. Un semana que no podía pasar algún tipo de alimento, ni siquiera las barritas podía pasar. El extraño dolor en mi estómago estaba ahí, y solo se intensificaba cada que recordaba las palabras de Tom. Era horrible, todo esto era horrible.
Hoy era otro día mas en que las ganas para ir a la escuela no aparecieron. Posiblemente ya estaba arrastrando materias, pero a estas alturas eso ya no me importaba. Solo quería dormir, dormir, y dormir. Me sentía cansada. Cansada de llorar todo el tiempo.

Eclipse | T.K | ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora