Capitulo 19

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No es lo que siento por ti, es lo que no siento por nadie más —Jaime Sabines.

El sol empezaba a ocultarse entre las nubes, los clores anaranjados del cielo y la luz del exterior que filtraba por los ventanales de la oficina en la que se encontraba el alfa, empezaba a bajar la luminosidad.

Su escritorio estaba lleno de papales, bolígrafos, lápices, diseños publicitarios impresos que aún seguía revisando. Tenía tres proyectos que terminar antes de finalizar el mes, los días avanzaban y eso empezaba a causarle dolores de cabeza. Por lo general sus días estaban llenos de reuniones con el equipo de trabajo que él lideraba, pero ese día fue la excepción.

Desde que llegó a su oficina, no salió de allí, y agradeció que nadie llamó o hizo cita para reunirse con el ese día. No recordaba cuando fue la última vez que pudo quedarse todo un día dentro de su oficina y adelantar todo el trabajo que tenía atrasado.

El alfa sintió su cuerpo algo rígido por permanecer sentado durante un largo tiempo. Se dejó caer en su silla, arrastrando la hacia atrás al estirar sus piernas y brazos, mismos que mantuvo sobre su cabeza. Su mirada se quedó fija en los sillones blancos frente a él.

Se levantó de su lugar con la intención de estirar sus piernas, manteniéndose de pie frente al ventanal que quedaba a pocos pasos de su escritorio.

Con las manos dentro de los bolsillos de su pantalón amarillo, vio el sol terminar de ocultarse. Su oficina tenía la mejor vista y el pocas veces estaba allí dentro para apreciar una escena como la de ese momento. Miró la hora en el reloj que colgaba en su pared del fondo revestida en madera, mismo que marcaba las 6:30 de la tarde.

Del otro lado de la ciudad, Jimin se encontraba con la respiración agitada solo por los calentamientos antes de iniciar la nueva coreografía, en la que una vez más sería protagonista junto a su compañero de baile.

—Necesito que todos vean como lo hacen ellos, y que lo repliquen —ordenó el instructor en medio del salón en el que practicaban.

Jimin y Young-soo repitieron sus movimientos como demostración, ya empezaban a costurarse a ese tipo de órdenes, especialmente cuando iniciaban una nueva coreografía.

El resto de la tarde, solo escucharon los regaños del instructor porque aún no había coordinación en nada, cada presentación siempre era más difícil que la anterior y aquella no era la excepción.

Aunque sabía que no debería ser perfecto en el primer intento, al omega le frustraba no poder aprender un paso de baile al instante. En varias ocasiones estuvo a punto de caerse, si no fuese por su compañero estaría más en el piso que bailando, lo que arruinaba por completo la coreografía.

Cuando llegó la hora de salida, Jimin se dejó caer boca arriba en el piso. Podía sentir su cabello húmedo de todo lo que había bailado ese día, su pecho aún subía y bajaba por toda la fuerza que empleó minutos atrás.

—Tranquilo, solo es el primer día después de nuestro éxito con RED, es normal que esto suceda —le alentó Young-soo parado junto a Jimin.

—¿Crees que logremos eso que él quiere? —cuestionó Jimin mirando al alfa desde su lugar.

—Claro que sí, somos primer bailarín, podemos hacer eso y más —afirmó Young-soo tratando de animar a su compañero, quién solo asintió y recibió las manos extendidas del alfa en para poder ponerse de pie.

—¿Necesitas que te lleve? —preguntó mientras salían del salón de prácticas.

—No, me quedaré un poco más —le hizo saber Jimin mientras bajaban por el ascensor hasta el primer piso, donde ambos se despidieron antes de tomar caminos separados.

Chosen |OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora