El destino de los no destinados

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Dinastia Joseon

1392-1897

El león es un animal representativo del poder, el valor, la fuerza y la realeza. Uno de los animales guardianes por excelencia debido a que es considerado como el destructor del mal y portador del conocimiento. Como el dragón que representaba la península coreana, el león era el protector de fuerzas malignas y el principal símbolo de la familia real Min.

El clan Min lideraba en el suroeste del país en la provincia Gyeongsang. Se caracterizaban por su fiereza; por su gran capacidad de liderar y seguir los mandamientos de la madre Luna. Una familia honorable que se ha mantenido en el trono de Gyeongsang por décadas.

La familia real Min tenía bajo su mando terratenientes yangban y toda una aldea que era liderada por dicho clan, uno que también era conocido por los alfas dominantes con facciones felinas, miradas feroces y profundas, así como mujeres omegas que causaban envidia por la delicadeza de sus rostros y la elegancia de sus siluetas tan bien marcadas, lo suficientemente fuerte como para llevar en el vientre los hijos que le darían longevidad a su reinado.

Min Yoongi era el alfa mayor entre sus cuatro hermanos alfas y 2 hermanas omegas, era el heredero legítimo del reinado. Ha sido entrenado desde una edad muy temprana, con un entrenamiento mucho más riguroso después de haberse presentando como alfa.

A pesar de no tener la contextura de un alfa, su capacidad de liderar era tan fuerte como los grandes músculos de sus hermanos, todo lo que le faltaba en estructura física lo tenía en su razonamiento y capacidad mental.

En el umbral de la casa real de los Min daban la bienvenida dos leones tallados en bronce, macho y hembra, alfa y omega. Destacaban allí como protectores contra malos espíritus y toda acción maligna.

En la alcoba del hanok que compartía con su hermano menor, el sol se filtraba a través de los árboles y se colaba por la ventana de madera.

—Quiero darle un regalo a mamá por su cumpleaños—comentó Yoon-woo mientras terminaba de vestirse—. He ahorrado para hacerle una escultura de bronce.

—¿Para eso quieres que te acompañe? —cuestionó Yoongi caminando hacia el exterior con su hermano siguiéndoles los pasos.

—Hay un alfa en el clan Park que me recomendaron, pero solo le conozco el nombre y no... —hizo una pausa al ver como Yoongi envainaba su espada a sus costados, algo que no era necesario si fueran con escoltas—. Quiero que me acompañes porque padre siempre insiste en que no vagáramos somos por las aldeas.

—Padre cree que no somos capaces de clavarle la espalda a alguien. Nos entrena como guerreros, pero no nos cree capaces de serlo, que estupidez —susurró mientras se subían a sus caballos.

—¿Por qué se supone que seremos reyes no guerreros o aún peor verdugos? —contestó su hermano mientras galopeaban hasta el distrito que era liderado por el clan Park.

Los Park no eran una familia no tan numerosa como los Min, pero si casi igual de importantes. Solo había un posible heredero para ser yangban y un hijo omega que les daría hijos que mantendría dicho título en la familia.

El clan Park eran líderes del territorio en el norte Gyeongsang, tenían como símbolo el caballo, un animal que es conocido por ser una criatura majestuosa y con una fuerza inigualable. Representaban la libertad y la determinación, características que representaban dicho clan.

El caballo es un animal que era conocido por esforzarse y no rendirse fácilmente, podían viajar 10 millas cada día y con una persona encima. Una filosofía de vida que ha sido utilizada por los Park desde el nacimiento de la dinastía Joseon.

Chosen |OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora