Capitulo 43

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Canción del capítulo: Rescue de Lauren Daigle

⚠️Éste capítulo contiene violencia intrafamiliar, así como la mención de temas relacionados al uso de armas de fuego, asesinatos y relaciones sexuales no consensuales. La historia no pretende promover ningún tipo de abuso. Si eres sensible a estos temas puedes dejar de leer cuando quieras.

Dicen que cada átomo en nuestro cuerpo fue alguna vez parte de una estrella, tal vez no me voy, tal vez me voy a casa —Vicent Van Gogh

En el fondo sabe que debía poner más resistencia en que Haejin volviera a sus vidas tan de súbito como lo hizo. Llegó con un discurso de arrepentimiento que su madre creyó al instante. Jimin nunca confió en el por como los abandonó sin decir nada, puede que no recordara cómo fue porque no estuvo allí, pero si vio el sufrimiento de su madre y esa fue razón suficiente como para no dejarlo entrar en su vida.

Pensó en aquella noche cuando intentó con desesperación que lo aceptaran. Recordó su mirada cuando preguntó por quién se supone que era su destinada, sus palabras exactas fueron "Está muerta", palabras que salieron de su boca sin una pizca de dolor; recordaba su mirada tan vacía. Debió darse cuenta de que para haber dejado a su destinada, se supone que debía estar peor de lo que lucía, en cambio no había nada más que un falso arrepentimiento y vacío en su mirada.

Saber que el acabó con su vida le causaba escalofríos por todo el cuerpo. Se sintió mareado y aturdido con la información que acababa de recibir. La imagen de su madre siendo asesinada, sangre en el piso de su casa, ella aferrándose a los brazos de su alfa y su verdugo. Pudo haber sido el destino de quien fue la destinada de Haejin y podría ser el mismo destino de su madre si no hacía algo.

Jimin reaccionó y salió corriendo del cuarto de arte, no pensó en nada más, no sabía que haría o que diría, solo estaba desesperando por hacer algo rápido, solo quería salvar a su madre de las garras de un monstruo disfrazado de oveja.

Haejin definitivamente era un monstruo, tuvo la osadía de acabar con la vida de su omega y destinada, no sabía cómo lo hizo o por qué, pero aquello era lo que menos le importaba mientras corría deprisa hacia su madre.

Su amigo no dejaba de gritarle que esperara por ellos, todo los demás no logró escucharlo, su mente estaba procesando la información. Su lobo estaba asustado, aterrorizado y estaba seguro que se podía percibir en sus feromonas.

Se detuvo en seco e intentó hacer algo más que solo correr hacia su casa y sacar a su madre de ese lugar sin tener que darle explicaciones. No tenía tiempo, era un asesino fugitivo viviendo en su casa tranquilamente, debía llamar a la policía, no podía hacer aquello solo.

Jimin le pidió a la alfa de su amigo que llamara a la policía y rápidamente le dio la dirección de su antigua casa. Tomó prestado el teléfono de Sunghoon y marcó el número de Yoongi, pero éste no le contestó; si estaba en una reunión sabía que no respondería a menos que supiera que era el quien llamaba.

Necesitaba que Yoongi supiera lo que estaba sucediendo, y lo único que se le ocurrió fue pedirle a la pareja que fueran a su lugar de trabajo y contarle lo que pasaba, de todos modos, la policía debería estar de camino a su casa, al menos de eso los convenció Jimin para que lo dejaran ir solo.

Llegó a la casa con la respiración agitada, su corazón latiendo con fuerza y muy nervioso. Su preocupación aumentó al ver que todo estaba tan tranquilo que le espantaba. Se detuvo en la puerta mirando hacia atrás, esperando que la policía llegara y así poder atrapar al hombre que se escondía en su casa.

Hasta que escuchó un gruñido del otro lado de la puerta, aquello claramente era su voz de alfa. Por instinto, Jimin colocó rápidamente el código de acceso y empujó la puerta.

Chosen |OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora