- Sufrimiento, Amor y Gritos

254 13 4
                                    

Caitlyn se levanta al no sentir a Vi a su lado. Mira para todos lados, el baño, cocina, sala, hasta el patio y no la encontraba.

Mirando su habitación vio que la ropa que usualmente usaba Vi no estaba. Caitlyn supo rápidamente que la pelirosa se fue, que se fue a Zaun.

Se vistió, tomó su riflle y le dijo a Martín para que la llevara y acompañara, el chofer condució lo más rápido que pudo. Caitlyn tenía miedo que la pelirosa haga algo estúpido o peor, que ya lo haya hecho.

Cuando llegó a Zaun sintió un escalofrío, las calles estabas frías y vacías. Tenía miedo de cada callejón oscuro por el que pasaba.

Martín sentía un escalofrío en la espalda, nunca había bajado a Zaun y menos sabía de las condiciones macabras en las que se encontraba este y eso que mucha gente le hablaba sobre el "Gran Oscuro Suburbano".

Entraron por un callejón un poco oscuro, pero era el más claro que estaba de los demás. Los dos podían sentir la tensión que cargaban sus cuerpos por el miedo a que algo o alguien apareciese.

—Hola bonita— dijo un viejo saliendo de la oscuridad y poniéndose al frente de la sheriff con una botella de alcohol en la mano media vacía.

—Permiso, necesitamos pasar— dijo Martín intentando ser amable y aparto al hombre suavemente.

—No te hablo a t- — dijo el viejo sin poder terminar por ser golpeado por la sheriff —¡CABRONES!— dijo el viejo gritando.

Caitlyn le pasó por el lado y tomó el brazo de Martín para seguir su camino hasta llegar a ese lugar. Escucho unos gritos así que se asomó cautelosamente en la ventana. Lo que vio le hizo sentir una furia por su cuerpo.

—Vi— grité para entrar rápidamente por la ventana y dispararle a Vander varias veces para que cayera.

Me abalancé hacia Silco golpeándolo repetidas veces con mi rifle. Cuando ya no reaccionaba tiré el rifle a un lado y me acerqué a Vi tomándole las mejillas.

—Vamos Vi, vamos— dije mientras mis lágrimas salían suplicando que el brillo que estuviera dentro de ella no la convierta en un mounstro.

—Cai-it, s-sácalo de a-quí— dijo con dificultad dirigieron su cabeza hacia Evan mientras intentaba no dejarse controlar por el brillo.

Caitlyn miró hacia un lado y vio a él chico. Rápidamente lo desamarró.

—Cupcake, c-cuídalo— dijo con dificultad.

Caitlyn se paró al frente de Vi y se agachó.
Negó con la cabeza repetidamente mientras lloraba. Vio como esos ojos grises se desaparecieron de la zaunita y se volvieron rosas brillante, su piel se tornó un gris claro y sus venas empezaron a sobresalir con un color violeta.

Mientras tanto Martín tenía una glock apuntando a Vander por si se movía. Pero este se levantó corriendo hacia el chofer tirándolo hacia el otro lado. Corrió hacia donde cayó y lo golpeó hasta matarlo. Se podía ver la sangre dispersa por el piso y paredes, el sonido de cada golpe que le dio resonó en el mounstrosa cabeza.

Caitlyn liberó a la pelirosa y esta corrió hasta Vander golpeándolo fuerte. Ahora tenían la misma fuerza y el mismo impacto. Golpeó y golpeó hasta dejarlo inconsciente.

Su respiración era constante y no sabía porque pero tenía enojo, su mente se oscureció nuevamente y corrió hacia Caitlyn tomándola de el cuello y apretándola.

Caitlyn quedándose sin aire tomó la cara de Vi y la acarició, pudo sentir como esta poco a poco volvía a su color de piel, se calmaba y esos ojos grises que la mataban aparecían de vuelta.

Arcane - Amor Y OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora