Halley's Comet // Matthew Healy

𝒫𝒶𝓇𝓉 𝑜𝒻 𝓉𝒽𝑒 𝒷𝒶𝓃𝒹

Matty's POV:

Ella solía escucharme, pero no vagamente como el resto de las chicas que espera el momento en el que abras la cartera o te bajes los pantalones. Maddison me escuchaba con atención, y se emocionaba o empatizaba conmigo cada vez que era necesario. Eso me hacía sentir importante.

El día de mi cumpleaños me regaló un cuaderno empastado a mano por ella misma y un par de bolígrafos caros para que nunca dejara de escribir. Lloré mucho esa mañana, porque me levanté para fumar igual que siempre y en una silla junto a la ventana me había dejado un pastel y una nota que decía "Feliz cumpleaños".

Eso era todo en lo que podía pensar mientras estábamos en el avión y Maddison dormía sobre mi hombro con su rostro ruborizado a casusa del calor y su expresión como de angustia, y también pensaba en lo difícil que iba a ser dejarla todo un año mientras me iba de tour con la banda en el que ella no iba a estar.

Pasamos rápidamente a mi departamento en cuanto llegamos a Nueva York y luego fuimos al suyo para dormir. Ya comenzaba a parecerme complicado conciliar el sueño si no estaba junto a mí para abrazarla, pero por hoy estaríamos bien.

Entramos a su departamento, se quitó el suéter y fue directo a la cocina para prepararnos algo de cenar. Preparó una pasta con salsa que solía quedarle deliciosa y cenamos frente al televisor viendo caricaturas para gente adulta.

Más tarde ella tomó un baño y yo abrí la ventana para fumar marihuana.

- De todas las sustancias que consumí, jamás probé eso. - Habló Maddy saliendo del baño con una toalla envolviendo su cuerpo.

- ¿Jamás? - Ella negó con la cabeza. - A mí me resulta estimulante su uso, siento que el mundo avanza más lento y pienso mejor.

- ¿Me dejarías fumar contigo alguna vez? - Comenzó a vestirse frente a mí y no pude evitar mirarla.

- Para nada, ¿qué tal si te vuelves drogadicta? No podría cargar con esa culpa.

- A mi edad sería difícil ser adicta a algo que no fuera el trabajo. - Dijo poniéndose una camiseta.

- Calla, ni siquiera tienes treinta. - Reí y aspiré el contenido de mi pipa y ella no dejaba de prestarme atención. - ¿Quisieras intentarlo ahora?

- ¿Puedo? - Se sentó junto a mí en la cama con su largo cabello todavía escurriendo.

- Sería bueno si quieres experimentar, estoy aquí para cuidarte. - Le tendí mi pipa y el encendedor.

- ¿Qué tengo que hacer?

- Sólo enciéndela, aspira en la pipa, traga el humo y escúpelo de vuelta. No aspires demasiado o te dará tos y será incómodo para tu garganta. De hecho, es mejor si... - Me levanté rápidamente para traerle un vaso de agua de su cocina y lo coloqué sobre el buró cuando estuve de vuelta. - Dejaré esto aquí por si te dan ganas de toser.

Encendió la pipa y siguió el resto de mis instrucciones. No sé porqué me parecía tan excitante verla fumar. Tosió un poco, le di el vaso de agua y le indiqué que aspirara un par de veces más.

- ¿Cuándo me hará efecto? - Preguntó.

- Pronto. - Comencé a fumar yo, pero en mayor cantidad y con más velocidad para alcanzar el mismo efecto.

- ¿Cómo sabré cuando ya me hizo efecto?

- Sólo lo sabrás. - Le sonreí.

Pasando unos minutos ya me sentía completamente drogado, así que todo a mi alrededor se había vuelto lento y gracioso.

- ¿Te sientes drogado? - Me preguntó y su voz parecía descomponerse palabra por palabra con lentitud.

- Lo estoy. - Reí como idiota y comencé a frotar el lóbulo de su oreja. - ¿Qué tal tú?

- Siento que no hablo lo que pienso, como si mis palabras salieran en automático sin que tenga tiempo de pensar lo que yo bien digo. - Comenzó a reír también. - No, espera, no puedo pensar bien lo que pienso. No, no, no, no, lo que digo, mierda, ¿de qué estaba hablando?

- No tengo idea, pero bésame. - Me incliné hacia ella y tomé su cabeza desde la nuca para darle un beso profundo. - Sabes a marihuana.

Ni siquiera podíamos besarnos sin reír, así que nos recostamos sobre la cama todavía tendida, mirándonos de frente y paseando nuestros dedos suavemente por todo el cuerpo del otro. Mis sentidos se encontraban sobreestimulados, lo que rápidamente se convirtió en excitación y tuvimos sexo estando todavía drogados. No recuerdo haber sentido otro orgasmo tan intenso como el que había experimentado con ella.

- Te amo. - Susurré sin pensar en su oído mientras acababa sobre su espalda.

Nos quedamos dormidos inmediatamente después y no despertamos hasta el siguiente día cuando sonó la alarma. Me levanté diez minutos antes de que se fuera para llevarla al trabajo, me despedí de ella con un beso en la entrada de su edificio y me fui a mi departamento para seguir durmiendo.

Dormí varias horas, aproximadamente hasta medio día. Me despertó una videollamada de Adam Hann para que hiciera con ellos la cuenta regresiva hasta el lanzamiento del primer single de nuestro álbum. Part of the band ahora estaba en internet y segundos después, Maddy me envió varios mensajes.

Madd-Mad-Maddy<3: Te estoy viendo en el monitor justo ahora.
Madd-Mad-Maddy<3: Justo cuando creo que no hay forma de que puedas
ser más guapo, apareces en este vídeo.
Madd-Mad-Maddy<3: Dios, te ves tan guapo!!!

Me distraje los segundos que me tomó leer sus mensajes en la vista previa de la pantalla, pero los chicos reunidos en casa de Adam volvieron a llamar mi atención.

- Deberías estar acá, Matty, también es trabajo tuyo y se siente un vacío sin ti. - Habló Ross. - No sé qué diablos sigues haciendo en América.

- No va a volver. - Se incluyó George. - No sin ella al menos.

- ¿Ella, quién? - Preguntó Ross de vuelta.

Miré otra notificación en mi pantalla:

Madd-Mad-Maddy<3: Estoy muy orgullosa de ti. Ven
por mí más tarde para que celebremos tu single como se debe.

- Tienes razón, George, ya no podría irme sin ella aunque quisiera.

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Nota

Ando bien enamorada, verdaderamente, ajajajajajaja. Mañana subo algo temprano, ya me dio sueño. Gracias por el apoyo <3