~🎸~
PAOLA
05 de Junio.7:00 a.m
— Hola ma — le dije en cuanto entré a la cocina. Se encontraba parada frente a la estufa cocinando unos hot cakes.
— Hola Hija, ¿cómo amaneciste? — volteó a verme con la misma sonrisa que siempre la caracterizaba.
— Bien, ¿y tú?
— Bien, ¿Vas a salir hoy? — preguntó.
— Voy a ir al instituto, a terminar de organizar lo que tenemos pendiente y en la tarde me reuniré con mis amigos — le dije mientras tomaba una taza y me servía café.
— Sabes...— comenzó a decir — Me siento muy orgullosa de ti...y de ver como sirves a Dios con todo tu corazón.
Sonreí. Me acerqué a ella y la abracé.
— Gracias a ti por apoyarme y orar mucho por mi...
Se que soy lo que soy por la Gracia de Dios pero también por el ejemplo que mís padres me dieron y por sus oraciones.
Le ayudé a terminar el desayuno y juntas nos sentamos a la mesa. Luego de orar comimos y cuando acabé me despedí y salí.
Subí al coche y comencé a conducir con rumbo al instituto. Me detuve en una avenida pues el semáforo estaba en rojo y había demasiado tráfico.
Mientras esperaba logre divisar a un chico que caminaba, llevaba puesto una sudadera con gorra, todo en color negro. Lucia algo asustado se podría decir, miraba para todos lados como si estuvieran vigilandolo.
— ¡Hey, Hola! — le grité. Él volteó inmediatamente.
Se quedó sin moverse por varios segundos. Al ver que no decía nada, volví a hablarle:
— ¿Vas a algún lado?
— Eh...Hola — dijo mientras se acercaba a la ventana del auto — ¿Eres...Paola cierto?
— Así es — sonreí.
— Soy malo para los nombres — comentó — Y...bueno yo ya me iba, solo vine a hacer un par de cosas...parte de mi trabajo.
— ¿En que trabajas?
Se quedó pensando por varios segundos.
— Es...un poco complicado — fue lo único que dijo — Bueno...Fue un gusto verte pero debo irme.
Este chico si que es misterioso.
— Claro — dije — Por cierto, ¿Estas libre hoy en la tarde?
— ¿por qué?
— Hemos programado una reunión con los chicos de la iglesia, nos reuniremos, cantaremos y pasaremos un rato agradable...¿Quieres venir?
Pareció dudar por varios segundos pero al final dijo: — Esta bien, Iré...
Sonrió.
Le dije la hora, dirección y nos despedimos.
El semáforo cambió y avancé nuevamente. Al llegar al instituto me estacioné y luego de bajarme, entre.
Las vacaciones para los estudiantes ya había iniciado. La graduación había sido a principios de Mayo como cada año, pero los miembros del equipo misionero y maestros aún teníamos que estar asistiendo pues en este mes teníamos programado un par de actividades que íbamos a realizar en esta ciudad y en otros lugares.
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DE REGRESO A CASA (LIBRO #4)
EspiritualErick es un chico que lucha por salir de las drogas y de un mundo oscuro en el que se adentró cuando su familia murió. En medio de la oscuridad que lo rodea una luz alumbra su vida y una voz le dice: Vuelve a casa hijo mío. y cuando decide hacer cas...