-Entonces..¿porque hiciste lo de anoche?.
-...
-Muichiro ...
-_______YO TE AMO. ERES LA UNICA, UNICA QUE HA CONFIADO EN MI Y HA ESTADO CONMIGO. EH SIDO SOLITARIO HASTA QUE LLEGASTE TU.
-¿Porque yo?. Ni siquiera soy bonita..
Te tapo la boca.
-¿Que no eres bonita?
-¿Una chica como yo te parece atractiva?.
-Si, una chica con fleco, cabello rosa claro, preciosos ojos celestes.. figura perfecta, piel suave... Tierna, alegre, hermosa... Eres la chica perfecta.
-....No es verdad.
-¿No? Si no fuera verdad... ¿Haría esto?.
Comenzó a besarte los labios con demasiado cariño. Tomo tu cuerpo y te atrajo a el, te cargo por los muslos mientras no paraba de besarte, se levantó contigo en sus brazos. Tus manos se encontraban en sus mejillas mientras tus labios se ocupan en regresar los besos.
El sin que te dieras cuenta te llevo a su finca, entraron, fueron directamente a su habitación, la cual ya tenía una cama cómoda.
Te dejo sentada sobre ella, se sentó, te tomo por la cintura y te obligó a sentarte en sus piernas con tu espalda en su rostro. Te abrazo por la cintura y comenzó a besar tu cuello desde atrás.
-Ahh~ m-muichiro...detente...-Gemiste.
-hmmm... No.
Dijo besando tu cuello y provocando más y más gemidos por parte tuya.
De la nada, una mano de deslizó por tus muslos.
-No se vale.. ahora traes un pantalón...-Susurro cerca de tu oído.
-Lo se... Es que...
Desabrochó tu pantalón y metió su mano en el, comenzó a buscar tu clítoris con sus dedos.
-¡Ah!.-Gritaste y te recargaste en el.
-Querida...pero si ya estás mojada~.-Susurro contra tu oído.
-¿Y-y que significa eso?....
-Que ya puedo entrar.
Sonrío y comenzó a frotarte la clítoris con las llenas de sus dedos. Tu solo soltabas pequeños gemidos como respuesta al placer que te hacía sentir. Tus piernas comenzaron a temblar con su toque.
-Mui... Muichiro...-Susurraste.
-¿Hum?.
-T-tengo demasiado calor...
-Es esa blusa que tienes puesta... Que te parece si... ¿La retiramos?.-Sonrio maliciosamente.
-Pero....
-traes ropa interior, ¿No?.
-Si pero...
-Pero nada, con todo permiso...¿Puedo retirarla?.
-Yo.... Está bien. Hazlo.
El saco sus dedos de tu pantalón y desde atrás de ti comenzó a quitar tk camisa, levantando tus brazos y retirando tu camisa.
El echo un vistazo y...
-Dios mío.... Pero si estás muy... MUY desarrollada..
-¿Apenas lo notas?
-Tecnicamente... Si.-Comenzo a besarte el cuello desde atrás.
Volvió a meter una de sus manos en tu pantalón, entre tu entrepierna solo para sentir lo mojada que estabas aún más.
-Ahg...____, yo....no puedo más... Necesito...
Metió sus manos debajo de tu brasier y comenzó a acariciar uno de tus pechos, masajeando los haciendo te gemir y alzar la cabeza un poco.
-Ah~ Muichiro ~
-Son grandes y... Suaves...
Busco tu pezón y comenzó a jugar con el, haciéndote temblar.
-¡D-detente!-Dijiste.
Cuando menos te diste cuenta, el en un movimiento demasiado, pero DEMASIADO RAPIDO, metió su mano en tus bragas y comenzó a frotar mejor tu vagina.
Ahora sus dos manos estaban ocupadas, una de ellas complacía tu pezón y la otra tu vagina.
-Mira...no haré algo más a menos de que ti me permitas hacerlo.
-Muichiro....
-h-hazlo.-Dijiste nerviosa.
En ese momento, Muichiro tubo una erección y se levantó justo en tu otra entrada, tu trasero.
-muichiro...siento algo duro...
-Lo se, y todo es tu culpa... Y como tú provocaste esto... Tu lo arreglas.
Dijo eso para después meter de una dos dedos de su mano en tu vagina y con la otra mano jalonear tu pezón. Esto te hizo gritar y gemir. No parabas de temblar y gemir, se sentía tan bien pero no te podías controlar.
-¡Detente!.
No supiste como, tu cuerpo comenzó a saltar en sus piernas, solo tu sintiendo más y más y cada vez más la fuerte erección de Muichiro. El seguía moviendo bruscamente sus dedos dentro de ti y su mano que se encontraba descansando en tu pezón, bajo tu brasier y busco en otro pezón, también aplastando, pellizcandolo, jalandolo y dándole vueltas.
Sentiste como te apretabas y al igual que tu el, no era de más que lo dijera.
-Dios...te estás apretando demasiado... Tu decide. Quieres este orgasmo o lo hago más rápido.
-Rápido... ¡RAPIDO!.
Tus caderas de movieron brincando un poco en sus piernas y este comenzó a mover más rápido y fuerte sus dedos dentro de ti hasta que....
Te llegó el orgasmo y te corriste en su mano.
-Muichiro... Lo siento.... Yo-
El comenzó a reírse de lo avergonzada que te veías, depósito un bello y tierno beso en tus labios y te dió la vuelta, abrazándote.
-No te preocupes.... Eso no importa. Estás es mi finca, yo lo limpiare.
-N-no....
Te tomo en sus brazos, te llevo a la cama, te coloco en ella y te dejo sin el brasier y con los pantalones medio abajos.
-Yo arreglo... Tu te acuestas. ¿Está bien, estrellita preciosa?.
-Esta bien...
