Alas de oscuridad

Capítulo 9

Aaron

- ¿A qué te refieres con princesa heredera? -Gritó Andrés haciendo señas para que se lo deletrearan o algo más directo, porque no parecía entender lo que mi padre había dicho.

-Pues lo que he dicho, Margoth es vuestra hermana y tiene tanto derecho como vosotros al trono. -Explicó una vez más mi padre, algo cansado.

-Bien, ¿y de donde dices que salió nuestra pequeña hermana? - Hoy Andrés no parecía entender nada de nada. -Traicionaste a nuestra madre, eso está claro, porque sus ojos casi negros no tienen nada que ver con los tuyos, o con los de mamá.

-Cuando tu madre murió yo... -Una pausa. - Margot nació enferma y estuvo mucho tiempo después de su nacimiento en la enfermería de la cuidad siendo tratada por los mejores doctores, pero nada pudieron hacer. Entonces me recomendaron enviarla donde un curandero durante algunos años. Él ya ayudó a recuperarse, y ahora ha vuelto para ocupar su lugar en este palacio.

- ¡¿Y nos lo ocultaste durante 18 años? -en eso debía estar de acuerdo con mi hermano, no era justo traer una extraña a nuestras vidas, así como así. Pero el rey siempre hacía lo que quería sin consultar a nadie, después de todo era el rey.

Sabía que esa chica traería problemas desde el momento en que la vi por primera vez. Ya suficiente tenía con soportar a Andrés que pensaba que yo le quería arrebatar el trono, ahora con alguien más en la línea sería imposible tratar con él.

-Bien, que sea tu princesa. Yo ya no quiero seguir escuchando nada. -Andrés estaba completamente enfadado, pero tenía que contenerse, El Rey había hablado.

-Lo será. Será la princesa de este reino. -Se encaminó a la puerta de la armería, donde habíamos estado hablando. -Y por eso la entrenareis con la espada, la heredera del trono debe saber defenderse en caso de ataque. Es un miembro importante de esta familia y nadie, fíjense muy bien, nadie podrá hacerle daño sin pasar antes por encima de mí. -Dicho esto abandonó la sala y nos dejó a mi hermano y a mí con la cabeza llena de pensamientos.

Que yo recuerde, nuestro padre nunca se había referido a nosotros como lo hacía con Margoth. Estaba seguro de que mi padre nos amaba, pero esta revelación podría abrumarnos.