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Narradora omnisciente

A las hermanas Yoshimura les toca el turno de la noche, junto con los hermanos Haitani.

Ran esta con Saori cuidando las tiendas de conveniencia y Temari con Rindou cuidando algunos bares, en uno de ellos hubo un pequeño altercado con unos tipos que estaban ebrios y solo se dedicaban a causar disturbios, solo eran ciudadanos comunes que estaban pasados de copas, así que Temari le ordenó a Rindou que no los lastimara y que solo los dejara irse a casa, para su suerte el menor de los Haitani le hizo caso, aunque a regañadientes.

- Entiendo que quieras pelear, pero no puedes aprovecharte de unos ebrios -le dijo con mucha paciencia como si le estuviera hablando a un niño.

- Si, lo sé, que aburrido -se cruzó de brazos con un puchero.

Esa acción consiguió sacarle una sonrisa a Temari, luego de unos segundos de silencio por fin habló.

- A ti te agrada mucho Saori ¿verdad? -preguntó la mayor mirándolo de reojo con una pequeña sonrisita.

- No...que...no...no sé de qué hablas -empezó a ponerse nervioso.

- jsjsjs es que eres muy obvio Rindou, solo responde

- ¿Y que si me gusta? -se puso a la defensiva.

- Nunca pregunté si te gusta, pregunté si te agrada -respondió ladeando la cabeza en su dirección con una sonrisa divertida.

Rindou al darse cuenta de que acaba de confesar sus sentimientos se sonrojo tanto que casi se desmaya.

- Amm bueno si... tal vez ella me gusta un poco -respondió desviando la mirada hacia otro lado-. Tu estas bien con eso? -la volteo a ver preocupado de que ella se opusiera.

- Mi opinión no importa Rin, solo quería saber si voy a verte seguido por mi casa -se limitó a decir.

Después de todo Rindou había demostrado ser más educado que Ran, y trata bien a Saori, ella es la hermana mayor pero no es dueña de nadie, la castaña sera quien decida qué pasaría entre ellos, pero Temari solo quiere estar segura de que nada malo le pasara a su hermana y aunque el de anteojos fuera peligroso parece alguien a quien se le puede confiar algo importante.

- ¿Qué hay de ti con Ran? -pregunta mientras se forma una sonrisa pícara en su rostro.

- No hay nada, es un idiota, cada vez que lo veo quiero darle una paliza y lo haría si Mikey no me regañara cada vez que saco el tema -gruño apretando los puños.

- ¿Tanto así? -pregunta mientras se carcajea, Temari solo lo miro con ojos entrecerrados.

En ese momento vieron llegar a la tercera pareja que le tocaba patrullar esa noche.

- Las tiendas ya cerraron, Yoshimura-San.

- Bien, ¿Oigan les importaría quedarse hasta que este lugar cierre? los demás bares ya lo hicieron, este cerrara en unos minutos.

- Claro, nos encargamos.

- Gracias chicos, buenas noches -luego de despedirse le hizo una seña a Rindou para que se fueran.

Comenzaron su camino en busca de sus respectivos hermanos, cuando Temari escuchó un silbido a unos metros de donde iban pasando, esta volteo la cabeza en dirección a aquel sonido y pudo ver un grupo de chicos muy enojados caminando hacia ellos, a algunos los reconoció de inmediato, son los ebrios de aquel bar y por lo visto habían vuelto con más de sus amigos, por lo que Temari pudo contar rápidamente eran al menos 10 tipos.

- ¿Sabes cuatro ojos? No me gustó como me trataste allá -dijo uno con el ceño fruncido.

Si bien Rindou acató la orden de no romperles los huesos, tal vez no fue muy amable al sacarlos del lugar.

 𝑨𝒈𝒓𝒊𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆; Ran Haitani [𝗧𝗿𝗶𝗹𝗼𝗴𝗶𝗮 #𝟭]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora