𝑨𝒈𝒓𝒊𝒅𝒖𝒍𝒄𝒆; Ran Haitani [𝗧𝗿𝗶𝗹𝗼𝗴𝗶𝗮 #𝟭]

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Narradora omnisciente

Es temprano por la mañana, Temari despertó, pero al ver el reloj vio que le quedan al menos tres horas antes de tener que ir a la escuela, por lo que se levantó y camino hasta el baño donde se disponía a darse una ducha.

Al terminar apago la regadera y se envolvió en su toalla, frente al espejo, cepillo sus dientes, para luego tomar su secador, lo enchufo y...

Plup

- AAAAAH-quedó a oscuras totalmente-. Su puta madre! -trato de encender la luz otra vez, sin éxito.

¿Tu eres pendeja mi niña? Por qué presionas el botón de nuevo? Ya vez que no hay luz.

La peli violeta salió del baño y caminó hasta su habitación, ahí tampoco hay luz, fue raro porque si la habían pagado, se vistió rápido y bajó las escaleras, caminó hasta la sala de lavado donde se encuentra la llave térmica.

- MIERDA!!!!

El grito sonó por toda la casa y provocó que de un salto su hermana saliera de la cama y corriera hacia donde estaba la mayor, pensando que algo malo le había pasado.

-¿Qué ocurre? -preguntó con ojos de plato.

- Está mierda hizo cortocircuito! -respondió para después apretarse el puente de la nariz-. No toques nada, llamaré a alguien.

La hermana menor corrió a vestirse para salir de la casa, caminaron hasta una cafetería donde la hermana mayor llamó a alguien que pudiera revisar el problema.

- Enviaran a alguien a ver que paso en un rato -anunció cuando cortó la llamada-. Dicen que hicimos bien en salir de ahí, por lo general los cortocircuitos provocan incendios -dijo mientras tomaba café.

- I-incendios?? -preguntó preocupada.

- Mhm -miro la hora-. Como sea, no es algo que podamos controlar... ya casi es hora de ir a la escuela.

Cuando terminaron de desayunar se dirigieron a la estación del metro para después ir a la escuela.

Durante la hora del almuerzo Temari recibió una llamada de la compañía eléctrica, donde le daban aviso de que enviarían a alguien a arreglar el circuito eléctrico pero que no sería hasta dentro de dos días, y que aun así no se preocupara, no había riesgos de incendios ni nada parecido.

A la peli violeta le molesto un poco tener que estar dos días sin luz, pero no hay nada que ella pudiera hacer más que esperar a que fueran a arreglarlo, en el camino de regreso a casa, las hermanas tuvieron que pasar a comprar velas.

Fue una tarde algo complicada, pues cada que entraban a alguna habitación, por reflejo intentaban encender la luz.

Para cuando la noche llegó, las hermanas intentaban hacer algo de comer, en un momento Saori salió de la cocina y caminó hasta el lavadero para buscar unas prendas de ropa que se estaban secando del día anterior.

- H-Hermana! -grito desde donde estaba.

- ¿Qué? -preguntó mientras salía de la cocina y pasaba por la sala.