Fue la muerte tener que esperar hasta la medianoche. Sofia intentó leer, pero ella no podía concentrarse. Jugando con la ropa de su hermana no logró entretenerla mucho tiempo porque Camila era mucho más alta que ella. Pero sí encontró un suéter de cachemira que se puso encima de su camiseta de tirantes. Tal vez podría invitar a Max para que la acariciara como una gatita. Luego usó el maquillaje de Camila para arreglarse un poco. Después se limpió la cara y se puso un maquillaje más ligero, deseaba poder hablar con Lauren y Camila , pero pensó que probablemente estaban muy ocupados. Ni que no se hubiera dado cuenta adónde había ido su hermana, torció los ojos. Había estado observando desde la ventana—pero no vio mucho porque cerraron la puerta muy rápidamente. Ella soñaba despierta cuando escuchó a Max llegar a su apartamento, vio el reloj. Las 11:40, quería bajar las escaleras corriendo y estar con él, pero comprendió que quizás necesitaba tiempo para prepararse. Aunque la espera fue una tortura, se contuvo hasta las 11:56 antes de salir corriendo. Max abrió la puerta descalzo, vestido con jeans y una camiseta, su pelo estaba mojado y peinado hacia atrás. En silencio la dejó pasar. De pronto se puso nerviosa. La sensación era tan extraña para ella que no supo qué hacer, así es que agachó la cabeza y se quitó la chamarra. Acomodándose en una silla, respiró profundo y se enderezó para ver a Max de frente.
"Yo—" Él se le acercó, tomó su rostro entre sus manos y la besó. Dulce y sensual, lento pero intenso, sus labios jugaron juntos. Ella se le acercó, con las rodillas debilitadas y el corazón palpitando fuerte.
El rozó sus labios una vez más.
_Buenas noches, Sofia.
"Hola." Su voz le dio escalofríos, pero de esos que la invitaban a frotar su cuerpo sobre el de Max.
_¿Tienes hambre?_ él preguntó acariciando sus brazos.
"Me muero de hambre." Gracias, Camila, por la cachemira.
_Ven._Max tomó su mano y la llevó a la cocina.
Él la tomó de la cintura y la cargó hasta sentarla en el pretil, tocó su rostro y luego sacó dos copas. Ella lo observó interesada.
"¿Hoy me darás vino?"
_ Sí._Él abrió un refrigerador para vino que ella no había visto la última vez y revisó unas cuantas etiquetas hasta que encontró una botella de su agrado.
Como experto, la descorchó y sirvió vino para los dos.
"¿Por qué?" ella preguntó aceptando el vino.
_Porque esta noche no vas a manejar."_Él la observó desde el filo de su copa. Ella parpadeó, desconcertada. Luego sonrió ampliamente y alzó su copa.
"Entonces salud."
Él sonrió. _Salud.
"Me puse tan nerviosa," dijo ella, bebiendo un sorbo. "O sea, esto es algo muy distinto para mí"
Max sacó un sartén. _¿Por qué es distinto? Los chicos normalmente no cocinan.
Ella arrugó su nariz. "Es mentira. Eso no es lo que me pasa."
_¿Entonces qué tienes?_ él preguntó, hacienda una pausa para analizarla.
"Casi nunca me gusta un muchacho tanto como tú me gustas."
_Eso es ser honesta.
"Probablemente no debería ser tan honesta."
_¿Por qué lo dices?_él preguntó, sacando un par de cosas del refrigerador.
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PERFECTA PARA TI (CAMREN)
Teen FictionCamila ha perdido su creatividad. Camila acaba de ser contratada para re-diseñar la pagina web de la mejor empresa para adultos de todo el país, pero su musa no pudo haber elegido un peor momento para desaparecer. determinada a recuperar su sensual...