En tu mirada rubí

Cap 13: ¿Y si te falto el respeto y luego culpo al refresco?

Sé que estoy actualizando muy rápido, pero tengo la idea en la cabeza y no me gusta guardar nada en borrador xq me da anciedad esperar y la semana q viene ya tengo un montón de tareas atrasadas porq esta semana me eché las bolas al hombro y no hice nada :D así que lo más seguro es que no pueda actualizar y aprovecho ahora.

  Disfrútenlo ✨

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Emer

Quiero desaparecer de la fas de la tierra. No puedo contener tanta vergüenza en la cara.

Estoy seguro que mi presión arterial se pasó del límite porque siento la sangre correrme en el cuerpo como si estuviera en un campeonato de autos de carrera.

Y agregado a eso, quiero matar a mi hermana.

¡Hoy pasé casi todo el día rogándole que no me hiciera pasar una vergüenza y es lo primero que hizo!

Definitivamente no se puede contar con la familia.

Es que, ¿Cómo se le ocurre decir a Blake que Shely es mi novia? ¡Está claro que lo hizo a propósito! Quiere burlarse de mí y hacerme la vida imposible, hace eso siempre con todos mis amigos. Eriza metiche.

–¡D-deja de estar hablando sin saber! ¡Entrometida! –le grité con mi mejor cara ardiendo en llamas de la pena. Podía ver la expresión confusa de Shely, debe estar pensando que soy más tonto de lo normal.

–Es un gusto, novia de Emer –para colmo su noviecito le siguió el juego, seguro que aguantaba la risa. Genial, estoy quedando como el payaso del circo– espero Silvia no te haya asfixiado con preguntas.

–Para nada, fué muy interesante platicar.

No quiero imaginar de qué trato su plática. Quien sabe que ideas le metió en la cabeza de mí

–¿Lo vez? ¡Le agrado! –Silvia me observó burlona y yo le dediqué una mirada tan asesina que sentí se me salían los ojos. Por favor que ya no hable más– deberías haber traído una novia así mucho antes.

Juro que me faltó muy, muy, muy poquito para invocar el martillo y pegarlo contra esa gran bocota. Si no fuera porque está embarazada, ahora mismo nos estuviéramos matando a golpes.

Estaba indignado, enojado, las manos me sudaban y sentí que el alma abandonaba mi cuerpo.

–¡Y-ya basta Silvia! Ella no es mi novia.

Blake pareció darse cuenta de lo mal que la estaba pasando y entre empujones se la llevó al cuarto. Al menos alguien si tuvo piedad de mí. Se lo agradezco, pero igual ya el mal estaba hecho. Maldita Silvia...

Observé a Shely, ella parecía ajena a todo, como si no le importara las palabras estúpidas de mi hermana mientras yo quería morir y que el diablo se llevara a Silvia y la hiciera arder en el infierno por chismosa. ¿Cómo se atreve hacerme algo así? Justamente con Shely, no podría ser delante de cualquier otro sino con ella.

Ya sentía que mi voluntad por pasar un buen día iba de la mierda.

–L-lo siento mucho –dije aún más avergonzado, la humillación me hacía tartamudear– es que ella...me saca de quicio a veces. Trata de ignorarla.