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Charlie miraba la mano de su prometido. Le causaba gracia aquel anillo de plástico de botella pero lo importante era la intención.
No es como si no tuviera dinero para un anillo de verdad, es que la ansiedad le había ganado; La curiosidad de saber si Nick se habia arrepentido en ese pequeño lapso de tiempo.

Lo veía descansar. Ya era de madrugada así que se recostó sobre el pecho del rubio y cerró sus ojos para dormir.

[...]

—Charl—besaba todo el rostro del rizado con la intención de levantarlo —lamento despertarte amor pero estoy hambriento.

—uhm, cómeme a mí.

Nick rió—sabes que lo haría—Charlie sonrió y tomó la mano de su novio para que esta sostuviera su cadera.

El rubio con sus dedos recorrió todo el cuerpo de su pareja con suma delicadeza. Su suave piel con aroma a vainilla inundaban sus fosas nasales. Su mano llegó al elástico del pijama—¿Puedo?—preguntó en voz baja.

Los ojitos de Charlie brillaban observando a Nick—claro que puedes amor —sonrió y escondió su rostro entre el cuello del rubio, dónde depositó besos delicados.

Las manos de Nick desvistieron la parte baja del rizado y comenzó a masturbar el miembro de este, quién apenas soltaba gemidos ahogados.

—no tengas pena de gemir, me encanta escucharte disfrutar —su voz cambió a una más ronca.

—agh, extrañaba esto—cerraba sus ojos hundiéndose en el placer.

—yo más. Extrañaba verte así, hacerte sentir bien —susurró en su oído.

De pronto, Charlie se separó lo cuál descolocó a Nick hasta que lo vió quitarse la últimas prenda, su remera.

—eres bellísimo — se unieron en un beso apasionado mientras las manos de Nick paseaban por la espalda desnuda.

—ya, quítate la ropa por favor —comenzaba a tocar el pecho de su pareja por debajo de la remera.

Nicholas se quitó todo lo más rápido posible. Estaba desesperado y también quería tocar a su novio.

—te deseo Charlie—el rizado tomó el pene de Nick y comenzó a masturbarlo. Los gemidos calentaban al menor de una forma increíble.

—dios, ya, follame.

El rubio introdujo sus dedos en la boca caliente de Charlie quién los humedeció con sus saliva.
Estos fueron introducidos por su cavidad anal para dilatarlo. Un quejido salió de Charlie.

—tranquilo.

—por favor Nick—suplicó.

Cuando ya estuvo preparado para la penetración, tomaron un condón de la mesita de luz y el mayor ya estaba preparado para comenzar a follar a su pareja.

Eran ellos dos, en una mañana soleada con un polvo mañanero.

Charlie chillaba y rasguñaba la espalda de su pareja, mientras montaba aquel miembro de tamaño promedio. Recordó lo mucho que extrañaba el sexo con Nick. Hacía rato lo venía esperando.

—te amo —susurró.

—yo a tí, Charl.

El choque entre pieles era audible y los gemidos inundaban el cuarto.

En una estocada más Nick se corrió dentro y Charlie también, solo que este manchó el torso de ambos.

Se recostaron en las almohadas y miraban la luz del sol que entraba por la ventana mientras Nick  abrazaba a su novio.
Jugaban con los dedos de sus manos, admirando sus anillos.

—te prometo comprar un anillo decente—rió Charlie.

—no hace falta amor, no me interesa de que esté hecho, ya sea un anillo de papel, de plástico o diamantes.

—te adoro, ¿Lo sabías?

—totalmente amor.

[🍒]

Eee no soy bueno escribiendo cosas chanchas.
En fin, estoy pensando en el final omg

Photos ; heartstopperDonde viven las historias. Descúbrelo ahora