Boruto Y Shinki ~ BoruShin ~

Prisión Mental VII 🏛️

Boruto estaba apoyado en el árbol donde solían juntarse de niño él y sus amigos. El viento soplaba con mayor intensidad llevándose consigo las hojas del lugar. Por su mente pasaron múltiples recuerdos de él junto a Shinki amándose hasta enloquecer.

Luego recordó cuando le llegó la noticia de su muerte, una parte de él murió también. Fue la peor experiencia vivida en verdad y los días más oscuros para Boruto. Muchísimo peor que lo vivido con los Ootsutsukis y eso que aquella experiencia fue en verdad espeluznante.

Sin embargo Boruto estaba preparado para morir salvandolos a todos. Pero no fue el caso, la era shinobi no llegó a su fin y su padre Naruto regresó de la dimensión donde yacía prisionero junto con Hinata, su mamá. El Séptimo volvió a ocupar su puesto de Hokage y la paz llegó al mundo una vez más.

Todos contentos, pero él ya no era el mismo de antes. Aquella experiencia lo había cambiado. Ahora tenía una personalidad diferente y espectativas distintas.

Seré leal a mi Hokage Sarada, hasta que asumas el cargo puedo hacer lo que quiera....padre. En cuanto a tí Shinki ¿Qué puedo decir? Te amo más que mi vida misma pero no aceptaré tu negativa. Luego de sufrir tanto tras creerme lo de tu muerte, no estoy dispuesto a seguir así. Viviendo en países diferentes ¡Jamás!

Pero la voz de Sasuke lo interrumpió en esos momentos, se detuvo a su lado y sonrió. Boruto se le parecía a él mucho más que su propia hija Sarada.

Sabía que no era necesario convencerlo de nada ya que Boruto iría junto a Shinki, solo que debían respetar sus tiempos. Ambos hablaron sobre los sentimientos y lo molestos que solían ser si no se los controlaban adecuadamente.

— ¿No crees que va siendo hora de sincerarte con él? — le preguntó Sasuke.
— Si pero sigo molesto Sasuke.
— Ya veo. Te molesta que él no haya hecho lo que tú querías. Con todos los demás eres comprensivo, pero tratándose de Shinki eres diferente. Solo tú deseas tener la razón.

Aquello no le gustó para nada a Boruto ya que se sentía expuesto, solo con Sasuke le ocurría eso. Además viéndolo como lo hacía su maestro, no sonaba nada bueno. Boruto suspiró profundamente. Sabía que tendría que ir a la aldea de la arena junto a Shinki y amarlo hasta perder el sentido.

Esa misma noche apareció en la casa de Shinki, más en concreto en su habitación justo cuando el pelinegro estaba semidesnudo. Había decidió hacer las pases.

— Me canse de esta situación Shinki, vine para quedarme. Tu no quieres venir a Konoha, entonces yo vendré aquí.
— Boruto — Shinki sintió que las lágrimas humedecían su rostro — Eres tan idiota como siempre.

Se lanzó a sus brazos devorándolo a besos. El rubio lo presionó contra su miembro que ya estaba endurecido. Cuando se alejó un poco para respirar le dijo:

— Te casarás conmigo Shinki.
— ¿Es un pedido o una orden?
— ¿Acaso eso importa Shinki?
— No, supongo que no. Acepto mi amor.

Esa noche hicieron el amor hasta perder el sentido y al día siguiente anunciaron su compromiso. La boda sería en una semana y duraría cinco días. Ambos vivirán en la aldea de la arena y Boruto será un ninja de la arena. Todo iba tomando forma para Boruto, su vida volvía a encaminarse y en esta ocasión nada ni nadie se la quitaría.

Amaba a Shinki con cada fibra de su ser, no pensaba despegarse de su lado nunca más. Así poco a poco Boruto volvió a sonreír no solo con Shinki sino con los demás recuperando su antigüa personalidad.

FIN