Varias one shot sobre este ship (Boruto x Shinki) escribiré en ésta antología donde encontrarán diversas historias de amores, desamores, encuentros y desencuentos.
*) Boruto x Shinki
*) Shinki x Boruto
Boruto reaccionaba lentamente, no estaba atado debido a que Shinki no lo permitió. Pero lo vigilaba todo el tiempo, hasta que el sueño lo venció. Por eso cuando el rubio despertó, él no lo supo.
Boruto se sentía confundido, su mente era un caos total llena de malos recuerdos, donde él era violado y golpeado una y otra vez. Sin piedad alguna. El dolor era su único compañero que jamás lo abandonaba. Boruto estsba harto de esa vida, ya no soportaba más.
Apenas podía moverse debido a lo pesado que sentía su cuerpo por las drogas. Sin embargo iba moviendo sus piernas poco a poco, respirando entrecortado.
-Eres tan inútil Boruto que tu amado Shinki te abandonó a mi merced. - ¡Mentira! ¡El me ama y me salvará! -¡Nadie te salvará maldito! ¡¿Sabes por qué?! ¡Simplemente porque no mereces ser salvado!
Los golpes tan fuertes y duros se sucedieron mientras Briam le decía aquello. Las violaciones se producían una y otra vez desesperandolo a más no poder.
Ahora Boruto volvía a ver a Shinki y su respiración se asceleró debido al intenso dolor que sentía que creer en las crueles palabras de Briam.
- Me abandonaste Shinki, sabiendo lo mucho que te necesitaba tú...tú...tú me abandonaste a mi suerte. Maldito. Por eso me pedías perdón ¿verdad?
Como pudo Boruto dejó la cama, y se dirigió a su estante donde encontró una lapicera. Sonrió con oscuro placer. Sujetó la lapicera dispuesto a acabar con todo.
Cuando Shinki despertó, vió a Boruto intentando suicidarse con una lapicera.
-¿Boruto? - dijo Shinki adormilado - ¡Suelta eso! - se lanzó al rubio y lo sujetó a tiempo, quitándole la lapicera para arrojarla lejos.
Boruto gritó de desesperación y forcejeó pero Shinki lo sujetó con sus brazos pegandolo a su propio cuerpo inmovilizándolo.
-¡No! ¡Sueltame! - Boruto lloraba, se sentía frenético ya que temblaba de pies a cabeza. - ¡Me abandonaste hace más de dos años!
- No fue así mi amor, nunca te abandoné. Nunca. - ¡Si lo hiciste! ¡¿Qué quieres ahora?!
- Tranquilo mi vida, te ayudaré a aclarar tu mente. - ¡No! ¡¿Por qué me hiciste volver Shinki?! - Porque te amo -¡Mentiroso! ¡Maldito.mentiroso!
Shinki sabía que si quería curar a Boruto de verdad, tenía que hacer uso de todo lo que la psiquiatría podía ofrecer por más duro y doloroso que sea.
Los enfermeros entraron y sujetaron al rubio para llevarselo a otra habitación, donde lo atarían a la camilla para empezar a suministrarle las drogas correctas. Esta vez, Shinki ignoraba los gritos y súplicas que Boruto. Si quería ayudarlo, debía permitir que el psiquiatra que habita en él aflore al completo.
Boruto forcejeaba, pataleaba en el aire, lloraba e imploraba piedad. Su mente estaba en verdad quebrada.
Pero fue amarrado a la camilla por los enfermeros sin problemas. El mismo Shinki acabó con su intensa desesperación tras inyectarle el sedante.
- No...¿por qué me hacen ésto? ¿Qué hice yo? - Shhhh tranquilo - le susurraba Shinki con amor.
- Ayúdame....Shinki... - Descuida mi amor, lo haré. - No dejes que...te siga lastimando...
Boruto sujetó la mano de su amado mientras se iba durmiendo tras ese lapsus de lucidez.
- Nunca te dejaré Boruto, nunca. - Ahora...lo entiendo...él me...me mintió en eso también.
Al quedarse dormido, recién Shinki pudo empezar a tratarlo como el psiquiatra que era.
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