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Una semana después...

Así que la situación era la siguiente, Alastor tuvo la semana más divertida de su vida a lado de Lucifer. Jugar y con un poco de torpeza Alastor había logrado cazar un parde conejos que había en la zona.

A Lucifer no le gusto el ver morir a esos seres pero tampoco quería que su amigo muriera de hambre, porque esa era la cuestión, la comida ya estaba escaseando y ya solo quedaba para al menos otros dos días más. Sin embargo, Alastor lo calmo diciéndole que podía seguir casando un parde animales y quizás vender sus pieles para conseguir algo de dinero.

Y así había sido su rutina de esta semana, el día de hoy Alastor se había animado a que Lucifer lo elevará un poco por el aire. El niño castaño tenía miedo de el vuelo pero al mismo tiempo desde que tenía memoria siempre había querido sentir la sensación de estar volando como las aves que siempre había visto por la ventana; Lucifer extendió sus preciosas alas y se impulso quedando nuevamente frente a Alastor el cual sonreía aún que estaba totalmente nervioso.

- No tengas miedo Ali, no es tan malo.-

- No volarás tan alto... ¿o si?- Lucifer se ríe ante los nervios traicioneros de su amigo, extiende su mano hacia el bajando un poco su vuelo.

- Confía en mi, ¿si?- Nuevamente la voz de Lucifer lograba calmarlo. A este punto no sabía que era lo que este chico era o clase de ser había invocado, era su amigo, quizás el único que tendría, claro que confiaría en el.

Tomo su mano, gentilmente Lucifer la tomó y poco a poco comenzó a batir sus alas elevándose. Alastor cerró sus ojos por nervios al dejar de sentir bajo sus pies descalzos el césped.
Se sentía como un muñeco de trapo siendo agarrado, sentía la brisa del aire golpearle todo el cuerpo gentilmente y sus delgadas piernas se movían levemente.

- Ali abre tus ojos.-

- No quiero...-

- No seas llorón, enserió abrelos.- Alastor lentamente abrió de a poco sus ojos viendo hacia abajo, grave error pues inconscientemente apretó hasta con las uñas a mano de Lucifer.- ¡No Ali, abajo no, acá arriba!-

Y cuando lo hizo pudo ver obviamente al sol tan brillante como todo los días, sin embargo lo que había de diferente era que en medio de la gran bola brillante estaba Lucifer. El cual le sonreía ampliamente, la luz hacia ver sus cabellos rubios como si fueran hilos dorados, sus mejillas rosadas parecían aumentar de color y su sonrisa era tan radiante y brindaba una gran confianza en el corazón de Alastor.

Es hermoso ...

Lucifer al ver más calmado a su amigo comenzó a volar primero en círculos para que se acostumbrará, una vez que escucho como Alastor reía empezó a volar un poco más rápido haciendo sigza en el aire, el niño castaño ahora tomo también su otra mano con fuerza y con gran agilidad Lucifer lo llevó hacia el lago pasando de el rápidamente.

Los pies de Alastor crearon unas pequeñas olas en el lago que le provocaron cosquillas y no pudo contener su diversión más.

Y Lucifer no pudo evitar también reír muy feliz por escuchar a su querido amigo reír, en su corazón sabía que esa sonrisa y esa risa eran genuinas.

Eso solo provocaba que su corazón lateral más rápido.

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Después de tanta diversión, ambos niños estaban en la habitación de Alastor. Habían construido una pequeña base construida en base a varios libros y colchones que habían ordenado juntos.

Tenían como única fuente de luz una pequeña lámpara de aceite que habían colocado en medio para leer un poco. Aun que también era de ayuda el hecho de que cuando Lucifer extendía sus alas están emitían un poco de luz blanca brillante.

- ¿Qué es una ninfa?- Pregunta Lucifer.

- Es una hada, hay muchas variantes de ellas. Hay ninfas del bosque, del aire, del agua.-

- Oh, ya veo.- Guarda silencio un momento y vuelve a su lectura.- ¿Qué es un príncipe?-

- Es un gobernante de un gran pueblo, tiene poder, riquezas y un ejército.- Le contesta normal Alastor mientras ojeada un libro que había encontrado en el que era antes cuarto de su madre.

- ¿Y tu que lees?- Lucifer se pone a un lado de el, extiende su ala derecha para alumbrar un poco mejor el libro pues había visto que Alastor se tayaba mucho sus ojos quizás por no alcanzar a leer por la poca iluminación.

- Es un libro sobre varios seres mágicos. Hay trolls, gigantes...- Mientras el decía los nombres de las criaturas le mostraba el libro a Lucifer, cuando pasaba de página decía el nombre de la criatura.- ...hombres lobo, angel... ¿ángeles?-

- Wow, ese se parece a mi.- Lucifer señala el dibujo que daba inicio al nuevo capítulo del libro.

El dibujo era de un ser alto, vestido con solo una túnica transparente, con una aureola en la cabeza y dos alas pequeñas. Era retratado como un ser bondadoso y hermoso.

- Si.. se parece a ti.- Lucifer mira más abajo viendo que habías más dibujos retratando otro tipo de ángeles que había.- Dice: Un ángel es un ser sobrenatural, cuya función principal es servir a una deidad suprema.-

- ¿Y los demás que son?, ¿son también ángeles?- Pregunta impaciente Lucifer al no poder leer el libro.

- Estos son Dominaciones: ángeles que dirigen a los otros ángeles.- Señala a uno el cual además de las facciones de las alas y vestimenta tiene una lanza.- Y estos son Principados: ángeles que gobiernan sobre los diferentes reinos de la creación.-

- ¿Y este que esta cerca de un trono que es?, tiene seis alas como yo.- Dice emocionado Lucifer.

Alastor ve la imagen, ve a un ángel que además de tener aquellas seis alas, tiene dos aureolas que se cruzan entre ellas. La túnica es un poco más corta dejando ver unos pantalones sueltos, su rostro carece de sonrisa y muestra a un ser imponente, como un soldado.

- Este es un Serafín: se caracterizan por el ardor y la pureza con que aman las cosas divinas; Siempre está al lado del creador.-

- Oh cielos Ali... ¿entiendes que significa eso?-

- Tu eres...-

- ¡Soy como una ninfa!- Responde emocionado el pequeño rubio llevándose sus manos a sus mejillas valiendo rápidamente sus alas de la emoción.

Pero su emoción para en seco al oír un sonido venir de la puerta principal. Es el golpeteo de alguien llamando para abrir a la puerta.
Alastor desconoce quien pueda ser y solo guarda silencio pensando en quien pudiera estar a estas horas de la noche y en medio de la nada tocando.

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demonio equivocado - RadioAppleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora