Te reto a cambiar el destino

Contrato

No sabía a qué se debía, pero de pronto, había dejado de llorar y se sentía mejor. Se permitió respirar una y otra vez ese aroma, le gustaba, tanto que sin pensarlo se acercó al pecho del alfa quien lo contuvo en sus brazos por unos segundos que les parecieron mucho más tiempo. Jimin de pronto reaccionó con espanto, se puso de pie de un salto y aún con cara de terror miró a Jungkook y se echó a correr escaleras arriba encerrándose en su habitación. 

El pelinegro se puso también de pie y aún cuando se sintió algo mal por la forma en que el chico se había ido sin despedirse, a pesar de todo lo que se había suscitado, albergó en su pecho la cálida sensación del cuerpo del omega acurrucado en él. Se fue a casa, iría a ver cómo iba Namjoon con el acuerdo prematrimonial que firmarían al día siguiente. 

Los Park aún estaban en la oficina, Chanyeol llegó con su padre -¿Me llamaste?- recibió un asentimiento y tomó asiento en la silla frente al escritorio. 

-Chanyeol, como sabes, mañana es la firma del acuerdo prematrimonial de tu hermano con Jeon Jungkook. Te recuerdo que esto es tu culpa y lo estamos haciendo solamente por salvarte y salvarnos todos de la perdición al ceder el cuarenta porciento de las acciones

-Lo tengo bastante claro- contestó con obviedad. Desde ese día de la apuesta, no había dejado de sentirse culpable y ahora un poco más porque estaba plenamente consiente de que estaban sacrificando a Jimin por su estupidez. 

-Pues bien, el acuerdo será que Jeon se casará con Jimin y a cambio, cuando yo fallezca, se quedará con el cincuenta porciento de todo que sería lo correspondiente a tu hermano- el joven alfa asintió -Por supuesto, no deseo que mi herencia quede en manos de un extraño, así que, dejaremos que pase un tiempo prudente y...- sonrió macabramente -mataremos a Jeon Jungkook- 

El hijo ahogó una exclamación de sorpresa -¡Estás loco! No, eso no papá- 

-¿Prefieres entregarle tu patrimonio al tipo ese del que no sabemos mas que es un bastardo con suerte? Yo no lo creo- se puso en pie y rodeó el escritorio para quedar frente a frente con su hijo -Es un buen plan Chanyeol. Él seguramente tendrá un cachorro con Jimin y siendo quien es, hará un testamento a favor del niño. Cuando esto pase, lo asesinamos y como el pequeño será menor de edad, la fortuna pasará a manos de su omega, nos congraciamos con tu hermano y asunto arreglado. Tendremos la fortuna de los Park y la de los Jeon- 

Todo había sonado de una forma tan fría, que hasta él mismo sentía que su padre había cruzado los límites, sin embargo no tuvo el valor de enfrentarlo o contradecirlo, en su lugar, asintió -Como quieras. Solo que no cuentes conmigo para hacer el trabajo sucio- 

-No querido hijo, no te pondría yo en peligro nunca. Tenemos tiempo, podré planear esto muy bien, para que no haya lugar a fallos y todos nosotros salgamos bien librados. Ahora, deja acuerdo la hora del encuentro con mi futuro yerno y luego volvamos a casa- regresó a su lugar al mismo tiempo que el joven alfa salía de la oficina aún totalmente sorprendido de los siniestros planes que acababa de escuchar. 

Jungkook había llegado con Namjoon quien le había explicado en lo que consistía el contrato -Por supuesto, dejé asentado lo que acordaste con el Doctor Park, es decir, que una vez casándote con su hijo omega, él te cedería todas sus acciones que equivalen al veinte porciento de la empresa y una vez fallecido el padre, heredarías tú el cincuenta porciento- su amigo asintió -Y bueno, también hice los ajustes que me encargaste, pero... ¿Estás seguro que ellos no se darán cuenta? ¿Qué pasará si lo hacen?- 

-Ten fe hyung. Estoy seguro que leerán solamente el primero y no se darán cuenta cuando les des a firmar los que tienen los ajustes- tomó aquellos en sus manos y los comparó con el original que darían a leer primero -Sí, a simple vista son iguales, tienen la misma distribución en los párrafos así que lo más probable es que firmen sin leerlos. De todos modos, trataré de distraerlos cuando lo hagan- En ese momento recibieron la llamada del señor Park y acordaron verse al día siguiente a las siete de la noche.