Te Hice Para Mí

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Mi linda novia.

MICHAEL

A los cinco meses todo era perfecto. Alice había iniciado una nueva vida con los mismos amigos que éramos nosotros.

Había olvidado gran parte de nuestra historia y la historia que pasó con Lucía. Pero parecía no importarnos porque seguíamos juntos.

Sin embargo nuestra Alice había cambiado. Sus sentimientos y manera de ver las cosas eran más reales y analíticos.

Aunque también tenía declive y momentos en dónde salía a relucir su habilidad para manipular y jugar con las personas.

Para hacer su vida un poco más interesante decía ella.

Wess era un nuevo de traslado que llegó desde Colombia. Integrante de los LH desde que tuvo cuatro años. Centrado totalmente en medicina general y maestro de la misma rama. Llegó a nuestro rincón de los LH el mismo día que Ian, Lucía, Alice y yo nos encontramos frente a la puerta.

Y cómo un día dije: "el destino es grande y nuestro mundo pequeño"  Se compró una casa en la misma manzana de la mía, era amigo desde la infancia de Ian y su madre conocía a la mía.

Pero yo a Wess, ni le topaba.

No, hasta que pusó los ojos en Alice. No, hasta que ella le sometió a su juego. No, hasta que vi a Alice interesada en él.

Entonces, solo entonces me di el afán de toparlo. 

El día que llegó, estábamos frente a la entrada de los LH discutiendo sobre quién llevaría la vespa y quién el Audi. Lucía quería ir en la vespa mía y yo me negaba dejarla a taryn. Alice quería ir en el Audi y si cedía a eso, obligadamente Ian y Lucía irían en la  vespa.

  —¿Hola?

Todos nos quedamos callados y después nos giramos para ver a un joven con el cabello azabache  y los ojos grises que cambió a un verde oscuro ante nuestras miradas.

Sí, era un merecido de los LH.

Di un paso al frente mientras Ian corría a saludarlo.

  —Tuve la información de que ibas a llegar mañana    —aclaré, estudiandolo con la mirada.

  —Sí, después rehice el informe y volví a enviarlo a "pelirroja" ella supo sobre el cambio de horario.

  —Aquí estás en el CEDE que está dirigido por mí. Lo mínimo que sea el cambio de informe se me hace llegar, antes que a la secundante ¿entiendes? 

  —Sí, Lexi   —respondió. 

  —Relájate, todavía no es la hora de la bienvenida  —dijo Ian, mirándome.

  —Y está preciosura ¿que? ¡Hola! Soy Lucía   —saludó Lucía, con una sonrisa coqueta.

  —¡Espera! Recién las iba a presentar   —se quejó Ian, mientras se interponía entre Wess y Lucía.

Alice lo analizó con la mirada. Su rostro perdió cualquier tipo de expresión, tal cuál hacía cuándo estaba con extraños.

  —Y ella es Alice, nuestra amiga   —habló Ian, acercándose y tapándome la vista de ella.

Di unos pasos a un lado para acercarme a ellos.

Wess asintió a modo de saludo y Alice hizo lo mismo.

  —¿Tampoco eres de los LH?

  —¿Por qué lo preguntas?  —respondió ella.

  —Al igual que a tú amiga, puedo percibir tu aroma.