|Girder.

90 12 0
                                    



























Episodio Cuarenta y Nueve: Girder.




















Era una niña. Una niña sonriente, pálida, con el cabello rizado y pecas en el rostro. Parecía alegre, feliz, soltando una risita bastante honesta que me daba la sensación de que estaba disfrutando el paseo.

—¡Oye, no tan rápido, no podré alcanzarte!—. Era yo, bromeando mientras corría para alcanzarla.

—¡Vamos, m...—.






















Loving him is like trying to change your mind

Once you're already flying through the free fall

Like the colours in autumn, so bright

Just before they lose it all

Losing him was blue, like I'd never known

Missing him was dark gray, all alone

Forgetting him was like trying to know somebody you never met

But loving him was red

Loving him was red


Desperté, jadeando al notar la luz del techo que estaba exageradamente cerca de mí calar en mis ojos. La canción de Taylor Swift aún sonaba a todo volumen, y entonces mis ojos se enfocaron en dos personas que me veían con una curiosidad impresionante.

—Cisco, ¿estás seguro de que esto funcionará?—. Preguntó una muchacha de cabello negro.

—Claro que sí, nunca falla—. Era un chico de cabello largo, masticando un dulce rojo.

Y entonces jadeé, regresando a mi misma mientras me levantaba de la cama y accidentalmente golpeaba al muchacho en la cara.

—¡Leah!—. Era Cisco, pude reconocerlo.

—¡Henry, Leah despertó! ¡Ella despertó!—. Pude visualizar a mi padre, que tenía un gesto preocupado en el rostro mientras casi corría a mi.

Se detuvo frente a la camilla en la que me encontraba, en la que básicamente parecía dudar si estaba o no de humor. Notaba que mi padre no tenía ni idea de qué hacer.

Fui yo quien lo jaló, abrazándolo con anhelo mientras comenzaba a sollozar. Dios, había sido una tonta, una estúpida. Una niña mimada y yo no era una niña mimada, no podía comportarme así.

—Lo siento, papá. Lo siento mucho—. Trate de disculparme, aferrada a su cuerpo.

—Está bien, hija. Lo entiendo, está bien—. Parecía tratar de sonreír, pero se veía más como una mueca.

—Bien, es bueno que tengamos a alguien con poderes. Ahora tenemos ventaja—. Fruncí el ceño ante las palabras de mi amigo.

—¿Qué fue lo que pasó?—. Busque una respuesta.

Noté titubear a la chica, mi padre se separó, un poco serio y el muchacho dudó.

—¿Quieres la explicación corta o la detallada?—. Gimió cuando recibió un codazo por la de pelo negro.

—No hay tiempo para la detallada, Cisco—. Le advirtió en voz alta.

—Bien—. Supe que era algo serio en cuanto tomó aire. —Harry hizo que explotara el acelerador de partículas una vez más para regresarle la velocidad a Barry, ahora Barry está atrapado en la Fuerza de Velocidad y Jesse, Wally y tú fueron golpeados por los rayos y las ondas de materia oscura. Wally está bien, tú acabas de despertar y Jesse está en coma—. Mi boca se abrió cuando terminó de decir todo eso.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 20, 2024 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Leah. | Caitlin Snow. | 1. | En Proceso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora