Carson
—Ya cumplí con lo que vinimos a hacer y tengo que irme —le dije a MacKay. Él iba frente a mí con documentos en las manos. Ni siquiera estaba seguro de que me hacía caso. A veces pensaba que hablaba solo.
—Ya te dije que hay cosas que hacer. El caso no está cerrado —explicó.
—Y a mí eso no me importa —espeté. Algunos compañeros me miraron feo por hablarse de esa manera mi superior —. Yo cumplí con lo que acordamos —entró a su oficina y lo seguí. Cerré la puerta y lo enfrenté. Él por su parte tomó asiento en su silla acolchada.
—Lo sé hijo, pero hay cosas que hacer —golpeé la mesa con ambas manos, con las palmas abiertas —. Necesito verla. Tengo que estar con ella.
—Esto puede esperar —lo miré.
—Ella no puede esperar —le aclaré —. Llevo fuera de su vida casi tres meses y las últimas semanas no hemos podido hablar. He estado metido aquí, ni siquiera duermo bien. No puedo pensar bien. La necesito.
—Evan...
—¡No soy Evan! Evan murió hace años —me señalé —. Ahora soy Carson Blackwood y necesito que lo entiendas —frunció el ceño —. No espero que lo entiendas, tampoco espero que me apoyes. Solo te pido que me dejes ir. Amo a Valerie y no la voy a dejar una vez más.
—En aquella ocasión no fue tu culpa. Graham te creyó muerto...
—Eso no lo justifica. La dejé sola y ese malnacido casi la mata —señalé —. No lo hará una vez más. No me importa si me reportas o no, esta noche salgo para Edimburgo y no intentes detenerme.
Salí de su oficina sin mirar atrás. Mis compañeros me miraban de una manera extraña por hablarle así a mi padre, pero él no entendía lo desesperado que me encontraba por ver a Valerie. Estos meses habían sido una cruel tortura para mí y ya no podía soportar esta soledad.
—Admiro que tengas los pantalones bien puestos —pasé al lado de Angus.
—¿Tú también crees que estoy haciendo mal? —cogí mi abrigo y las llaves de mi auto —. Porque MacKay piensa que me estoy equivocando —bajó los brazos y me siguió.
—Eres libre de hacer lo que quieras, Carson. No te voy a decir lo que debes hacer o no. Ya tienes la edad para saber lo que te conviene —salió detrás de mí —. ¿Qué es lo que quieres?
—Quiero ir a Edimburgo y buscarla. Decirle que la amo y que he comprado una casa para ellas, para que vivan aquí en Londres —miré a Angus y sonrió.
—¿Qué te detiene? —entramos al estacionamiento.
—Nada, no me detiene nada —sonrió. Palmeó mi hombro.
—Entonces ve por ella y no la dejes ir —le agradecí con una sonrisa.
—¿Cuándo te vas? —preguntó. Abrí el auto y me detuve para responder.
—Esta noche. No voy a soportar otra noche más sin verla —Angus negó con la cabeza.
—Te contuviste demasiado. Pensé que en cualquier momento ibas a salir corriendo para buscarla.
—Soporté demasiado y este es mi límite —metió las manos dentro de los bolsillos de su chaqueta —. Sé que me entiendes, Angus.
—Claro que te entiendo, Carson y no me tienes que dar explicaciones. Creo que ya es hora de que seas feliz también y si ella es tu felicidad está bien. Tienes que hacer lo que sientes —sonrió.
—Nos vemos pronto, amigo —nos despedimos y entré al auto. Conduje al departamento que estaba ocupando mientas vivía en Londres, pero nada más que Valerie decidiera qué hacer lo iba a desocupar.
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Mala Costumbre 🦋 (COMPLETO)
Romance"Aparentas dulzura, pero eres pura maldad " Gracias a la hermosa portada a @Aughostn, vayan a ver su arte.