Una noche cualquiera te acuestas con lo que creías que iba a ser un tío más que no ibas a volver a ver pero te equivocas, vas a tener que pasar mucho tiempo con él ya que te lo vas a encontrar todos los días en el trabajo.
Inconscientemente y de man...
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- Buenas - escucho una voz a mi espalda asustándome.
- Pedri - me quejo girándome y dándole un manotazo - Me cago en tu vida, casi me matas del susto.
- Gracias, yo también te he echado de menos - dice con una risa tocándose la zona del brazo donde la he dado como si le hubiera dado muy fuerte.
Hace una semana que no nos vemos ya que después de las vacaciones en Cádiz, él volvió a Tenerife para aprovechar la semana libre que le quedaba y yo me tuve que volver ya a Barcelona para empezar a llevar las redes sociales porque ya empezaban los entrenos de pre-temporada. Hoy ya él empieza los entrenos y ha vuelto a Barcelona esta mañana, no nos ha dado tiempo a vernos así que hemos quedado un poco antes en el parking de la ciudad deportiva.
- Eres tonto enserio - le digo antes de ponerme de puntillas y rodear su cuello con mis brazos abrazándole, él rodea mi cintura con sus manos - Te he echado de menos.
- Yo también te he echado de menos, mi niña - me dice antes de separarse unos centímetros de mi para agarrar mi mandíbula con una de sus manos y besarme.
Me besa con intensidad metiendo su lengua en mi boca recorriendo todos los rincones de ella, me empuja suavemente y ando unos pasos hacia atrás hasta que mi espalda toca una de las columnas del parking.
Pedri baja sus besos a mi cuello y cuela sus manos en mi camiseta rozando mi espalda.
- Pedri... - digo cuando me doy cuenta de donde estamos y lo que estamos empezando a hacer - Estamos en el parking de la ciudad deportiva.
- Joder... - me dice parando de besarme apoyando su nuca en mi hombro - Estás vacaciones a nuestra vida sexual no le han venido nada bien - me dice haciendo que yo suelte una carcajada. La realidad es que llevamos tres semanas malas en ese tema, ninguno de los dos hemos querido hacer nada en la casa del otro con los padres allí y en los únicos momentos que hemos estado solos ha sido en sitios públicos y pues no nos apetecía armar ningún escándalo.
- Y tanto que no - le digo riendo - Venga vamos - le digo antes de que se separe de mi y yo dejé un corto beso sobre sus labios.
- ¿Qué tal todo por aquí estos días? - me pregunta mientras empezamos a andar hacia dentro de la ciudad deportiva aunque hemos hablado todos los días.
- Pues normal, aunque un poco raros porque no estabais todos - le digo.
- Ya hoy no va a ser raro porque volvemos todos los de las selecciones.
Hablamos de todo un poco, de mis días aquí y de sus días en Tenerife hasta que nos encontramos a a Xavi que nos saluda y felicita a Pedri por la nation.
Poco a poco van llegando todos y nos vamos saludando entre nosotros hasta que empieza el entrenamiento.
El entrenamiento se me pasa rápido y cuando me quiero dar cuenta ya ha terminado. Los chicos entran al vestuario rápido para ducharse ya que al ser verano han sudado muchísimos, es prácticamente la hora de cenar ya pero hace calor en Barcelona.
