Una noche cualquiera te acuestas con lo que creías que iba a ser un tío más que no ibas a volver a ver pero te equivocas, vas a tener que pasar mucho tiempo con él ya que te lo vas a encontrar todos los días en el trabajo.
Inconscientemente y de man...
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- ¿Has visto las fotos que han sacado? - me pregunta mi hermano en el desayuno.
- Uhm - le digo mientras asiento.
- ¿Qué vas a hacer? - me pregunta.
- Nada, no puedo hacer nada - le digo dándole un bocado a mi manzana - Esto es la misma historia de siempre, lo mejor es pasar.
- Ya pero esta vez han salido fotos y puede que en algún momento vuelva a suceder, al fin y al cabo Alba trabaja en el club - me dice mi hermano.
- Fer no me empieces a agobiar, la gente no sabe quien es porque no se le ve la cara, me imagino que como no es ningún personaje público ni tiene ninguna red social pública no la pueden sacar en ninguna revista ni nada así que la gente no la va a agobiar y yo pues ya estoy acostumbrado - digo encogiéndome de hombros - Ha habido cosas peores.
- Vale, veo que lo tienes ya todo controlado, nos vemos a la hora de comer, voy a hacer unas cosas por Barcelona - dice despidiéndose de mi.
Cuando mi hermano se va meto los platos del desayuno en el lavavajillas y me paso la mañana casi sin hacer nada, a la hora de comer cuando Fer vuelve comemos juntos y cuando pasan algunas horas salgo de casa para ir al entreno.
- Sal ya, estoy fuera - le digo a Gavi cuando me coge el teléfono. Sí, lo llevo hoy una vez más.
- Voy - me dice antes de colgar y aparecer por la puerta de su casa - ¿Qué pasa tío? - me dice entrando en el coche.
- Bien, ¿y tú? - le pregunto arrancando el coche y dirigiéndome a la ciudad deportiva.
- Yo perfectamente - dice encogiéndose de hombros - Oye, la que iba contigo en el coche en las nuevas fotos que han sacado hoy es Alba, ¿no?
- Sí - le contesto asintiendo con la cabeza, ¿para que voy a mentirle?
- ¿Y en qué momento paso eso? ¿No era que no te caiga muy bien? - me pregunta.
- Ayer cuando estaba volviendo a casa, después de dejarte a ti, me la encontré por la calle y como estaba a punto de llover pues me ofrecí a llevarla a casa - le explico, me salto toda la parte de la discusión con su novio, que vino a mi casa y tal porque tampoco hace falta que lo sepa.
Gavi no me pide más explicaciones, no es el chico más hablador del mundo y en esta situación lo agradezco.
Cuando llegamos a la ciudad deportiva, nos vestimos con la ropa de entrenamiento y salimos al campo. Veo a Alba en su zona habitual, se le ve un poco desanimada y con la mirada perdida pero no me da tiempo a mirarla demasiado ya que Xavi nos llama para empezar el entrenamiento.
El entrenamiento pasa como siempre, a mi siempre se me pasa rápido, lo que más lento se me pasa siempre son las sesiones en el gimnasio.
- Te espero en el coche - le digo a Gavi cuando yo ya he terminado de vestirme - Aligérate.
