Una noche cualquiera te acuestas con lo que creías que iba a ser un tío más que no ibas a volver a ver pero te equivocas, vas a tener que pasar mucho tiempo con él ya que te lo vas a encontrar todos los días en el trabajo.
Inconscientemente y de man...
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- Apaga eso - le digo a mi novio mientras escucho la alarma sonar.
Noto como se separa de mi y a los pocos segundos el sonido de la alarma cesa.
- Cariño, venga vamos - me dice rodeando mi cintura pegándose a mi cuerpo por detrás besando mi mejilla.
- Tengo sueño - me quejo haciéndole reír.
- Venga... - me dice metiendo su mano por mi camiseta, buenos más bien su camiseta, descansando su mano en mi abdomen, desde que ayer se enteró de la noticia no para de tocarme la barriga aunque ahora mismo sigue igual que siempre - Tenemos cita a las 9:30, son las 8, suele haber tráfico así que vamos.
- Estoy muy nerviosa eh - digo girándome hacia él peinando su flequillo despeinado con mi mano.
- Yo también, no he podido dormir mucho aunque el jet lag tampoco me ha ayudado mucho.
- Yo la verdad es que he dormido bien.
- Ya ya, no hace falta que me lo digas, te abrazaste a mi como un mono y no me soltabas, tuve que poner el aire acondicionado porque me moría de calor - me dice soltando una carcajada.
- Perdón cariño pero es que te he echado mucho de menos - le digo haciendo una mueca - Se me han hecho muy largos estos días sin ti aww - digo apretándole las mejillas.
- No pidas perdón, yo también te he echado mucho de menos, además sabes que me encanta dormir abrazados solo que estamos en verano y pues hace calor pero puse el aire acondicionado y listo - me dice él echando un mechón de mi pelo hacia atrás acariciando mi mejilla antes de inclinarse hacia mi para unir nuestros labios.
Muevo mis labios sobre los suyos acariciando su nuca cuando tengo que apartarme rápidamente.
- ¿Qué pasa? - me pregunta confundido cuando me levanto rápidamente hacia él baño, me han dado unas ganas de vomitar horribles, no puedo contestar ya que simplemente entro al baño, me agacho delante del vater y vomito - Oh, nauseas - dice y lo escucho venir hacia el baño - Ay mi niña - dice agarrándome el pelo y acariciando mi espalda.
- Que asco - digo cuando termino de vomitar bajando la tapa del vater y tirando de la cisterna.
- Solo tienes náuseas, no tienes mareo, ¿no? - me pregunta preocupado.
- Sí, sí, mareos me han dado pocos - le digo poniéndome delante del lavabo para coger mi cepillo de dientes y empezar a lavarme los dientes.
- Ay mi niña, que mal, ojalá se te pasen pronto - me dice abrazándome por la cintura dejando un beso en mi hombro.
Me lavo los dientes y salimos del baño para prepararnos, tenemos la primera cita con la matrona para empezar a controlar el embarazo.
Cuando estamos listos bajamos a la planta de abajo y vamos directos al garaje.
