Una noche cualquiera te acuestas con lo que creías que iba a ser un tío más que no ibas a volver a ver pero te equivocas, vas a tener que pasar mucho tiempo con él ya que te lo vas a encontrar todos los días en el trabajo.
Inconscientemente y de man...
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- Buenos días, feliz cumpleaños Albi - me felicita mi tía cuando entre en la cocina.
- Gracias - digo medio bostezando dándole un pequeño abrazo - ¿Dónde están mi tío y Dani?
- Han ido a comprar churros - me dice dándole un sorbo a su café.
- ¿A comprar churros? - pregunto algo extrañada.
- Sí, se ha levantado tu tío con ganas de churros y ha ido a comprarlos con tu primo - me explica.
- Ah - digo empezando a hacerme el desayuno, ya que no me gustan los churros.
Sigo haciéndome el desayuno, y cuando termino me siento frente a mi tía mientras hablamos.
- ¿Vas a hacer algo para celebrar tu cumpleaños? - me pregunta.
- He quedado con María y con Claudia para cenar y salir después del partido - le digo - Porque mi tío me dijo que me iba a hacer una paella para comer hoy, ¿no?
- Sí, ayer fue a comprar las cosas para hacerla - me dice antes de escuchar la puerta de casa abrirse y cerrarse.
- Prima - escucho a mi primo gritar entrando en la cocina - Felicidades.
Me levanto de mi sitio y me agacho para abrazarlo.
- Gracias - le digo dejando un beso en su cabeza.
- Ven, te hemos traído un regalo - me dice cogiéndome de la mano y tirando de mi hacia el salón.
- ¿Un regalo para mi? - le pregunto y el asiente.
- ¿Olga? - digo entrando en el salón al encontrarme a mi mejor amiga - ¿Qué haces aquí?
- No sé, he venido a visitar a mi mejor amiga por su cumpleaños - dice burlonamente.
No digo nada más solo doy unos pasos ligeramente y la abrazo.
- Feliz cumpleaños, te quiero - me dice antes de separarse de mi.
- Gracias - digo antes de girarme hacia mi tío - Bonitos churros has ido a comprar - digo soltando una carcajada.
- Felicidades - me dice simplemente y yo me acerco a abrazarle - Toma, esto es tuyo - me dice al separarse cogiendo una gran caja y dándomela.
- Joder, que grande - digo antes de abrir la caja y encontrarme un casco de moto bastante bonito - Esto es demasiado, cuesta mucho dinero para regalármelo por mi cumpleaños - le digo haciendo una mueca.
- Es tu cumpleaños, no puedes quejarte - me dice con una sonrisa, nunca dejo que me regalen nada si no es mi cumpleaños o navidad así que en cumpleaños y navidad se aprovechan y me regalan muchas cosas - El otro día te estabas quejando de tu casco así que te viene perfecto.
- Madre mía, estás fatal - digo antes de abrazarlo - Gracias.
- Ahora, vamos a desayunar porque me muero de hambre - dice mi tío.
