I don't know how to feel/
No se como sentir
But I wanna try/
Pero quiero intentarlo.
—Billie Eilish.
Zoé
Siempre había sido la chica emocional, la niña que lloraba viendo películas y con canciones tristes, la niña que no sabía como gestionar bien sus emociones y que pasaba de un estado de ánimo a otro, la que en un punto estaba en lo más alto y de repente caía en picada sin tener de donde sostenerse. La chica de los bajones emocionales que destruían y me hacían sentir miserable. Esa era yo la mayor parte del tiempo.
Pero luego veía las fotos en las que aparecía sonriendo de verdad, casi parecía que nadie nunca me había hecho daño y que no me sentía como una mierda inservible por dentro que no merecía ni una migaja de cariño.
Veía esas fotos y me preguntaba dónde estaba esa chica escondida porque quería encontrarla más seguido, porque quería sentirme bien como cuando ella aparecía, pero también estaba esa parte de mi que tenía miedo de encontrarla y de contaminarla por completo y hacerla desaparecer. No quería que ella desapareciera, quería que se quedara todo el tiempo aunque sabía que no era posible.
Entonces ya no eran solo las fotografías, eran los recuerdos que invadían mi mente y me hacían sentir emociones mezcladas para después dejarme hecha un nudo de lágrimas y vacío. Porque así me sentía más veces de las que me gustaría admitir: vacía.
Y estaba harta de sentirme así.
Estaba harta de sentirme mal, de no saber qué hacer y no hacer nada al respecto, de pasar noches enteras de insomnio preguntándome a dónde demonios va esa chica que realmente se siente bien y no es solo un cascarón vacío.
¿Esa era yo antes de todos los fragmentos en los que me había convertido?
¿Por qué esa chica sí sabía como ser feliz por su propia cuenta y yo apenas me enteraba que solo era feliz cuando tenía personas que quería a mi alrededor?
No quería que mi felicidad dependiera de los demás, pero ni siquiera sabía como ser feliz solo conmigo misma, ¿cómo esperaba no ser dependiente de alguien más para sentirme feliz, completa?
Era dependiente de Kaden, de Liam… de River, y lo peor es que eso me gustaba en la misma manera en la que me aterraba. No tenía idea de lo fácil que era hacernos adictos a las personas que nos hacen sentir vivos, especialmente cuando pasamos tanto tiempo sintiéndonos muertos. Y ellos me hacían sentir, me hacían querer y desear una vida bonita y feliz, me demostraban que sí existía la luz en medio de toda la oscuridad en la que habitaba. Ellos hacían que esa chica apareciera, aquella que tenía esa sonrisa genuina y los ojos brillantes.
Era aterrador saberlo, porque te llenaba de posibilidades y escenarios fatales, porque había una voz que te gritaba que ella solo existía por y para ellos, no para ti… nunca para ti.
¿Eso significaba que iba a pasar toda la vida temiendo que algún día alguno de ellos saliera de mi vida para siempre y terminara rompiendo los trocitos que habían quedado de mi? ¿Qué acabarían por desparecer a la chica que era feliz por ellos?
No quería eso. No quería seguir siendo dependiente. No quería seguir sin saber a dónde pertenecía. No quería seguir sintiéndome tan vacía aún cuando sabía que había personas conmigo. No quería seguir siendo esa chica que no tenía idea ni siquiera de quien era cuando no había nadie más alrededor.
No quería seguir sintiéndome tan perdida.
Así que esa misma noche, después de llorar por lo que parecieron horas, tomé el teléfono e hice una llamada para empezar de cero.
Me coloqué los audífonos y dejé que la música me envolviera mientras devolvía todo lo que había sacado a la maleta.
No tenía idea de qué me esperaba de ahora en adelante, pero iba a arriesgarme porque quería encontrar a esa chica que sería feliz por mi.
Lo haría por mi.
𔓘𔓘𔓘
Oficialmente puedo decir que es mi capítulo favorito de esta historia, Zoé va a pasos chiquitos y vacilantes a veces, pero es más fuerte de lo que cree.Ahora ustedes bellos y pacientes lectores, comenten con un emoji qué les pareció el capítulo.
Yo ahora mismo soy esta: 🥹
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DIME SI VAS A QUEDARTE (QUÉDATE OTRA VEZ #1) ©
RomantikUn chico enamorado condenado a la friendzone. Un plan para conquistar a la chica. Unos borrachos que se salieron de control. Una noche en comisaría que ayudo a cambiar todo. Un beso robado. Planes inesperados y otros que fueron cambiados. Y muchos...