Just keep your eyes on me/
Solo mantén tus ojos en mi.
—Shut up and dance, Walk the moon.
River
Era el primer trago de alcohol que había tomado en lo que va de la noche. No me sentía con ánimos de beber hasta la inconciencia ya que quería ver a la chica que me robaba el sueño. Misma chica que no ha aparecido, y según Miss Información —o sea Jude—, no llegará hasta muy tarde, si es que llega porque está con el idiota de Mason.
Saque de mi cabeza cualquier imagen que los incluyera a los dos haciendo cosas no aptas para el horario familiar. Aún así, me sentía totalmente inquieto con esto. Y también jodidamente celoso y un poco molesto. Pero es que yo llevo días pensando y dándole vueltas a lo que ella dijo acerca de ser solo amigos y Zoé tan quitada de la pena yéndose con aquel imbécil. Sí, ya se que ella no me debe nada y puede hacer lo que quiera con quién quiera, pero los celos no entienden de razones. Y yo no la entiendo a ella. Así de sencillo. Mientras trataba de conquistarla ella me evitaba y ahora que yo me había alejado para pensar las cosas la había visto haciendo ademanes de acercarse a mi, pero todas esas veces se había detenido. Me parecía tierna y también me generaba frustración. Ella siempre intenta cuando siente que pierde algo.
Perder.
No quiero perder con ella.
Tampoco quiero arruinar nuestra amistad.
Pero estoy seguro de lo que siento y también de que si no lo intento entonces esto me carcomerá por dentro. Zoé vale cada sacrificio y consecuencia. Por eso, después de mucho, había decidido que dejaría que creyera que somos solo amigos, tenía que ser inteligente y conquistarla sin que se diera cuenta y ser amigos era una buena estrategia que había logrado ver gracias a Oliver, que él diera una buena idea se sentía muy raro, pero tenía sus momentos.
Ser amigos implica que podemos salir sin que se considere una cita y así ella no tendría excusa ni se negaría y, en el mejor de los casos, podría conseguir un beso. Ya saben, de esos para reforzar la amistad. En fin, el plan había cambiado ahora. Y tenía certeza de que funcionaria, además de que ya había tomado nota de todo lo que le gusta y lo que no para evitar cometer algún error. Sí, sin duda es un plan perfecto para enamorar a Zoé.
Fue solo un momento que aparte la mirada de la entrada y, cuando volví mi vista a ese punto, pude visualizar a la chica, sola. Su mirada marrón recorriendo cada lugar con emoción, sus labios esbozando una pequeña sonrisa. Estaba perfecta allí parada, solo existiendo. Mis ojos bajaron para poder recorrer su cuerpo y… no me malentiendan, Zoé siempre es hermosa, pero la ropa que trae puesta parece sacada del armario de mi abuela. Vale, no. Mi abuela tiene ropa más moderna que eso y encima es color rosa. Definitivamente eso no es algo que Zoé usuaria. No me cabe en la cabeza una sola excusa para que ella se vistiera de esa forma.
No me dedique a observarla como un acosador porque, en su lugar, fui en busca de alguien que me ayudara a ayudar a Zoé con nueva ropa.
Me apresure a buscar a la única persona que sabía tendría ropa de sobra en una fiesta y que su estilo era lo más parecido al de Zoé que conocía. Buscar a Jude era una tarea fácil. Solo tenía que ir en busca de las habitaciones donde seguramente se estaba tirando a alguien. Caminé en dirección a la habitación de está casa que ella siempre utilizaba durante estás fiestas, las personas se apartaban al verme pasar y eso me facilitaba muchos las cosas. El pasillo olía a alcohol y a algo asqueroso que seguramente era vomito. Hice una mueca de asco al ver al causante de ese olor, recargado contra la pared con la ropa cubierta de vomito, suerte que no tenía que caminar por allí pues la puerta de la habitación estaba unos dos metros antes de llegar al vomitón. Me detuve frente a esta, no se escuchaba gran cosa debido al volumen alto de la música. Abrí la puerta sin tocar, encontrando a Jude poniéndose los tacones rojos, completamente vestida. En la cama, con los brazos entendidos, estaba un chico completamente desnudo.
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DIME SI VAS A QUEDARTE (QUÉDATE OTRA VEZ #1) ©
RomanceUn chico enamorado condenado a la friendzone. Un plan para conquistar a la chica. Unos borrachos que se salieron de control. Una noche en comisaría que ayudo a cambiar todo. Un beso robado. Planes inesperados y otros que fueron cambiados. Y muchos...