Regina se sentía extraña, no sabía si era una mezcla de alivio junto con culpa, o un revoltijo de preocupación y un poco de irritación. Una vez más, como muchas otras veces, Rodrigo quedó en medio de riñas y pleitos ajenos.
Sin embargo, era precisamente que su amigo había llegado, mostrándose igual que antes, que Regina de alguna manera se sentía aliviada.
Aún si nunca dejo que se notara, múltiples veces se arrepintió de sus acciones precipitadas, no de irse en busca de Emiliano, pero sí de haber dejado a Rodrigo solo detrás.
Tenia miedo de que Rodrigo muriera, de que fuera usado simplemente por las personas que se aprovechaban de él sin que el idiota se diera cuenta.
Pero no podía evitar también imaginar, que si ella se hubiera quedado quieta en esos momentos, tal vez, no hubiera podido volver a ver a Emiliano de nuevo.
Además, frente a un Rodrigo que no notaba para nada los "amigos" que iba incorporando al grupo, Regina presentía que ella terminaría convirtiéndose en la "egoísta" o "amargada" del equipo.
En un principio no le importó como los demás la miraban, después de todo, ella no confiaba en ellos, e ingenuamente, estaba segura que al final de todo, Rodrigo estaría de su parte...
Qué obviamente, preferiría estar con ella antes que con desconocidos...
Y el resultado la irritó.
Pero ahora, o mejor dicho, desde que Emiliano fue rescatado y estaban a salvo, muchas veces pensó en Rodrigo.
¿Él estará bien?, ¿tiene comida?, ¿esos tipos ya mostraron sus verdaderos colores?, ¿estará herido?, ¿otra vez estás intentando ser un héroe?, todavía... ¿estás con vida?
Sin embargo, viajaba con el grupo de Derek, les daban comida y refugio, además, ahora ambos, Emiliano y ella, tenían un trabajo y un puesto que cumplir, no podía simplemente pedir que la ayudarán a encontrar a Rodrigo sin nada que ofrecer primero.
Lo primordial era volverse lo suficientemente fuerte, ya fuera para buscar a Rodrigo por ella misma sin morir en el intento, o lograr los méritos suficientes para pedir la ayuda de Derek y Daisy.
Le quedo muy claro con su arrebato tonto de antes, que si no era fuerte, moriría antes de siquiera alcanzar a la persona que busca.
Pero aún así, lo que más le preocupaba a Regina no era pensar que Rodrigo podría estar muerto, él era fuerte, incluso de los monstruos de carne podrida podía defenderse, el problema consistía en lo ingenuo que era.
'No me agrada...', ese fue el primer pensamiento de Regina cuando Rodrigo le presentó a Rebeca.
No podía basarse en un presentimiento solamente, por lo que todo terminó en ella exigiendo a Rodrigo que ya no aceptará a nadie más en su grupo.
Perla e Isaí no estaban tan mal, pero... en situaciones de vida o muerte, ella no les confiaría su espalda, no eran leales más que para ellos mismos.
Por otro lado, Alfred... un tipo que solo era bueno porque estaban de su bando, como ser humano aún si frente a Rodrigo era un rudo pero buen tipo...
Regina sospechaba que había mucha sangre inocente manchando sus manos.
Actualmente, ella no podía saber si sus sospechas eran ciertas, pero era realidad que un ingenuo como Rodrigo no podría manejar adecuadamente a un equipo así.
Antes Regina actuaba como 'la gruñona y mandona' del grupo, para antes de que Rodrigo distribuyera las tareas para cada quién, era ella quién los vigilaba y los reprendía constantemente.
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Soy una Ardilla en el Apocalipsis
FantasyMairena, después de morir de una manera realmente tonta y vergonzosa, se da cuenta que el limbo para ir al cielo no es como ella pensaba, lo primero que aparece ante ella es... ¿esponjosidad? Esta es la historia de una chica que no solo tuvo la mala...