Soy una Ardilla en el Apocalipsis

Capitulo #93. Mensajera.

"¿Estas seguro de que estarás bien?, todavía puedo cancelar el viaje, Rodrigo no se enojara por ir solo".

"No, Gigi estaré bien".

"¿Seguro?".

"Si".

"Solo iré por unos cuanto días, regresare a tiempo para festejar año nuevo, si pasa algo llámame, recuerda abrigarte bien aun si no te da frio, estarás trabajando esta vez en ciudad Pedregal así que debes cuidarte, ¿De acuerdo?".

"Esta bien".

"Si te sientes incomodo al hablar con los albañiles pídele ayuda al ingeniero Cruz, el terreno de construcción esta un poco alejado del área urbana así que tampoco te distraigas y olvides llevar las necesidades diarias importantes, ¿me estas escuchando?".

"... Ruidosa".

"¿Qué dijiste?"

"Nada, Gigi estaré bien".

"Ufff, se que estoy siendo muy entrometida pero estoy preocupada, es la primera vez que trabajas fuera, ¿podrás acostumbrarte?".

"... Eso creo".

"... ¿crees?, iré a decirle a Rodrigo que no iré".

"¡Gigi no!, estaré bien, será incomodo estar con desconocidos, pero es parte de mi trabajo".

"Emiliano... ahh... de acuerdo, solo porqué realmente es necesario ir a darle un vistazo a nuestra antigua casa, les daré tus saludos a la señora Tina y a don Lupe".

"Si, ten cuidado, estaré esperándote, diviértete en tus vacaciones".

"¿Por qué siento que estas esperando que me vaya?, ¿no quieres pasar navidad conmigo?".

"... No, no es eso".

"¿Enserio?, ¿no me estas ocultando algo?".

"Es sorpresa... un regalo".

"¿Qué dijiste?, no te escuche bien".

"Nada, no te preocupes".

"¡Ah rayos!, Rodrigo esta marcando, debo irme, ¡no lo olvides Emiliano, márcame por cualquier cosa!, iré directo a ciudad Pedregal para pasar año nuevo juntos cuando regrese de ciudad Mónica".

"Si, te estaré esperando".

"¡Me voy!, nos vemos dentro de cinco o seis días.

"Si, ten cuidado, nos vemos Gigi".

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Regina apretó sus puños.

'Me he vuelto loca definitivamente', pensó ella para después mirar directamente a Daisy.

El pensamiento que llegó a ella le hizo sentirse tonta e irónica, siempre fue cautelosa y podía ver perfectamente que las palabras de la mujer pelirroja guardaban muchas coincidencias.