Fanfics cortos Leoncito Kennedy x Reader escritos por mi, sin peticiones.
Adoro escribir y crear historias, así que desde hace mucho quise escribir mis propios fanfics de Leon Kennedy, mi husbando por excelencia.
Espero les gusten aunque sean corto...
-Ahora mismo quiero comerte a besos-susurré seductoramente besuqueando a mi prometida frente a la chimenea-¿Qué digo comerte? Quiero devorarte a besos y demostrarte cuanto te amo.
-L-Leon...¡¡Leon Scott Kennedy!! ¿Y la tarta y el chocolate caliente?-me preguntó el amor de mi vida sonrojada como una linda cereza.
-Eso puede esperar, tengo ganas de darte la mejor noche de tu vida-le susurré al oído- P-pero mejor me espero a que estés lista, n-no quiero forzarte tampoco-me detuve algo apenado por mostrarme demasiado ansioso.
-Quiero hacerlo aquí contigo, mi amor-me dijo T/N- Házmelo aquí, solamente estoy algo nerviosa porque...es mi primera vez-me sorprendí al saber eso, pero más cuando mi futura esposa se levantó y comenzó a desvestirse enfrente de mi.
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Semi desnuda, T/N reveló la lencería azul marino con encaje que tenia puesto, una lencería que yo no le había comprado para nada y se notaba que era nueva. Con tan solo fijarme en lo bien que remarcaba sus curvas y ese hueco en su entrepierna que dejaba medio expuesta su femineidad para mi, sentí una gran presión en mis pantalones...¡wow, soy un maldito hombre con suerte!
-M-mi amor, d-digo...y-yo q-quiero saber si...¿t-te compraste esa lencería a propósito?-no podía hablar apenas por lo excitado y nervioso que estaba esta noche, más nervioso que cuando pedí su mano.
-Si...yo...-respondió con timidez, cruzando sus piernas al notar mi mirada fija en esa zona- ¡L-Leon, mírame a los ojos cuando te hablo! Jiji- me regañó con un tono coqueto, ggrrr.
-N-no me lo pones fácil, cielo-sonreí nervioso todavía por la iniciativa de mi chica.
-Yo...quería dártelo como sorpresa, solo que no esperaba que lo hiciéramos tan pronto- confesó posando sexy para mi- Pero tienes razón, tenemos...el ambiente perfecto aquí, frente a la chimenea y...nosotros dos solos-me besó apasionadamente y me recosté con ella encima disfrutando del momento, con la chimenea al lado y nosotros a punto de hacer el amor en el suelo de la sala de estar.
Gemí entre sus labios en lo que nuestros labios y lenguas libraban una batalla en la que estaba perdiendo al dejarme llevar por el exquisito beso de lenguita que mi mujer me brindaba, distrayéndome lo suficiente para quitarme la ropa que traía puesta de la cintura para arriba, dejando a su vista y placer mis pectorales descubiertos...con lo cual me di cuenta de quien quería llevar las riendas del asunto en nuestra noche especial.
-Déjame cumplir tus fantasías, amorcito, pero al menos por ahora haz todo lo que te diga y si me lo haces bien...dejaré que me desnudez por completo-me susurró al oído con una mirada felina "¿con esta belleza me voy a casar? ¿T/N sigues siendo tu?", pensé bromeando en mi mente, dejándome seducir por la dueña de mi vida.
