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Daemon.

Las horas pasaron y me divertí mucho con Méndez y los chicos organizando la casa,aunque es mía y ellos fueron las que más se encargaron de decorarla,pero no me quejo,me gustó.

—Terminado— dijo Méndez mientras salía de la habitación.

—¿Ya nos podemos ir?— le pregunté a Méndez.

—Si,pero ¿seguro que vas a ir así?— preguntó Méndez mientras me miraba.

Me mire la ropa,estaba todo sucio por el trabajo que había hecho y tenía todo polvo por la ropa.

—Si, creó que debo cambiarme— reí rascando mi nuca.

—Yo me iré así salen— dijo Tara yendo para la puerta.

—Si, nosotras también— dijo Luisa refiriéndose junto a Tania.

—Nos vemos el lunes— despidió Dominic.

—Adios— se despidió Méndez.

Tara se fue junto con los chicos y yo fui a cambiarme a la habitación,busque rápido una camisa y un pantalón negro de vestir y unas zapatillas blancas,me acomodé un poco el pelo y me heche perfume. Salí y Méndez estaba tecleando su teléfono en el sofá, esperándome.

Creó que la historia de Bella Vista está haciendo efecto...NO.

—¿Vamos?— dije al salir.

Ella se paró y me observó por unos segundos de arriba abajo. Estaba haciendo su observación muy determinadamente y me miro hasta los hilos de la ropa,si es que eso es  posible.

—¿Que?— dije mirándome.

—Nada,solo que estás elegante— opin.

—Me gusta la ropa elegante   desde siempre y vamos a comer así que creó que la ocasión lo amerita— respondí.

—Bueno vamos que se nos hace tarde para un taxi— dijo.

—¿Taxi?— dije sarcástico.

—Eh..si ¿en qué otra cosa quieres ir?— dijo confundida.

—Solo ven— reí.

Camine hacia la puerta,salimos del departamento y bajamos las escaleras,fuimos hasta afuera y caminamos unos pocos pasos más hasta una cochera.

—¿Y esto?— pregunto.

—Solo déjame enseñarte— respondí.

Abrí la puerta de la cochera y caminé hasta una moto.

—Es una Yamaha R1 ¿Es tuya?— pregunto sorprendida.

—Si y tú serás la primera mujer en subirse— dije tomando los cascos.

—¿La primera? ¿Habrá más?— preguntó cruzándose de brazos.

—No lo quise decir así— dije apenado.

—Tranquilo— tomo el casco.

Yo le sonreí, salimos de la cochera y cerré con seguro,me puse el casco y arranque la moto.

—Sube— le dije.

Méndez se puso el casco y subió.

—¿Te gusta la velocidad?— pregunté.

—Si— respondió.

—Entonces sostente— advertí.

Aceleré un más de lo normal la moto y me dirigí hacia el restaurante,para esto Méndez tenía sus brazos entrelazados en mi cintura,me sostenía con fuerza y yo estaba en mi nube de egocentrismo por eso.

El Aeropuerto En el Que Te Conocí - [Finalizada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora