GABRIELA
Luego de lo que le dije a Namjoon me sentí muy mal, así que preferí faltar unos días a la escuela y fui a casa de mis abuelos paternos, ahí nadie me encontraría, no quería ver ni a mis amigos, porque sabía que si se enteraban de lo sucedido me iban a decir que esta vez había excedido los límites, no quería regaños ni reproches, así que unos días en el campo no me caerían mal.
En toda esa semana a penas comía o dormía, llevaba unos meses así, pero esa semana traté a mi cuerpo de la peor manera, me sentía mareada todo el tiempo y mis abuelos no dejaban de decirme que me veía pálida, pero yo no tenía ni un poco de apetito.
Pasaba mucho tiempo en mi habitación pensando en cómo decirle a mis padres que no me casaría con Jungkook porque él mismo me lo había pedido luego de enterarse de que yo era su prometida, su papá también se lo contó luego de la situación en la sala de maestros.
✨Flashback✨
Estaba sentada junto a la piscina el día siguiente de que regresamos a la universidad luego del encuentro sexual con Jungkook, estaba esperándolo a él para iniciar el entrenamiento, pero cuando llegó, primero me pidió hablar.
- Gaby tengo que decirte algo - "por favor que no me diga que se enamoró" rogué en mi mente.
- ¿Sobre qué? - seguía rogando que fuera cualquier cosa menos lo que yo estaba pensando.
- Quiero pedirte una disculpa - lo miré confundida - lo que pasó entre nosotros... Sólo lo hice para poder aclarar mi mente - confesó.
- ¿De qué estás hablando? No entiendo - estaba confundida.
- Te utilicé para darme cuenta de si realmente lo mío son las relaciones duraderas o si podría tener una relación pasajera, perdóname - comencé a reírme.
- Oye, no te atormentes por ello, yo te utilicé para tener sexo después de semanas en abstinencia, estamos a mano... ¿Pero dime, a qué conclusión llegaste? - me alegraba de que fuera eso y no una confesión de amor, además me hacía sentir más tranquila el saber que yo no era la única que lo utilizó.
- Definitivamente quiero algo para toda la vida - sonrió al decirlo.
- Me alegro de que lo sepas, pero... - me interrumpió.
- Sé que tú eres con quienes mis padres quieren que me casen, papá me lo dijo, pero, no lo quiero, eres hermosa, en el sexo eres la mejor, pero yo no quiero que ninguno suframos, no quiero que nos terminemos odiando si las cosas no salen bien, además me gusta alguien más - dijo apenado.
- Conejito, no tienes ni que decirlo, yo no te voy a juzgar y si no quieres casarte conmigo está bien, yo igual estoy enamorada de otra persona y tú lo sabes, y no quiero que nadie sufra, así que ve por esa chica y arriesga todo... ¿Puedo saber quién es? - la curiosidad me ganaba.
- Eres la mejor... La chica es Angie, ¿la conoces? - preguntó y asentí.
- Conozco a todo el mundo en la universidad, es mi deber conocer a los estudiantes, pero... ¿Alguna vez haz hablado con ella? Según yo no le dirige la palabra a nadie - cuestioné.
- No, pero la he visto mirarme, y sonrojarse cuando la descubro, sé que le gusto, pero antes de acercarme a ella quería hablar contigo - me dijo.
- Ve y conquístala conejo, y no te preocupes, yo me encargo de que nuestros padres no se vuelvan locos - le aseguré con una sonrisa.
Mi buen amigo no dejó de agradecerme por lo que estaba haciendo por él y yo era feliz de verlo con una hermosa sonrisa en el rostro.
Me moría de ternura tan sólo de pensar en Jk, se veía tan chiquito y lindo por lo emocionado que estaba de poder tener una relación como la que siempre había buscado, y no se diga cuando al día siguiente regresó a contarme que había estado con Angie, me sorprendió que cayera tan rápido, pero era Jungkook, guapo, con buen cuerpo, sonrisa preciosa, ojitos divinos, caballeroso y un demente a la hora de darte placer, no juzgaba a Angie.
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Perderte para saber que te amo.
RomanceAlgunas veces la vida no sale como la planeamos, yo por ejemplo no tenía planeado nacer y aquí estoy. Mi nombre es Gabriela, estudiante universitaria en una universidad privada de Ilsan, Corea del Sur y desgraciadamente para mí, me quedan dos estúpi...