4 - La Falda

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NAMJOON

Salí de la biblioteca muerto de celos, esa jovencita jugaba con fuego, me hizo saber que ella tenía el control de las cosas y en seguida me mostró quién era el dueño de sus más ardientes pecados.

Pero de verdad no planeaba rendirme y no conforme con tenerla, la iba a dominar para que hiciera lo que yo quisiera, porque las cosas debían hacerse a mi manera y ninguna niña me iba a decir qué hacer.

GABRIELA

Me quedé pensando en las palabras de Namjoon, quería descifrar si había un mensaje oculto detrás de lo evidente, pero Hobi no pudo contener la curiosidad, logrando que desviara mis pensamientos.

- ¿Qué fue eso? - preguntó bastante confundido.

- Adivina quién es tu nuevo vecino... - dije sin más y su cara se transformó ante la sorpresa.

- ¿Me estás jodiendo, verdad? - volvió a preguntar, levanté los hombros solamente y él comenzó a reírse - ¿me estás diciendo que la persona que compró la casa junto a la mía es ese sujeto y que además nos vio teniendo sexo? - asentí como respuesta y luego hablé.

- Sí... ¿Y sabes? Me gustó - confesé, pues no había secretos entre nosotros, en realidad ninguno.

- Detén tus sucios pensamientos Gaby, él es mucho mayor y va a ser nuestro director - sentenció Hoseok.

- Será sólo una vez, y ya sabes que yo no me enamoro, además, no es que sea muy viejo y es extremadamente guapo, seguro que esconde algo grande debajo de esos preciosos pantalones de vestir - dije con descaro y él sólo me veía entre sorprendido y divertido.

- Ve con cuidado señorita, aún queda mucho para graduarte y si las cosas salen mal quién sabe qué podría pasar - me advirtió con seriedad.

- Te preocupas demasiado cariño, todo saldrá de maravilla - aseguré sin pensar mucho en las consecuencias.

- Está bien, pero me tienes que contar todos los detalles si lo hacen en su oficina - cambió su expresión por fin y dejó ver que era un verdadero pervertido... Igual que yo.

- ¿Te imaginas eso? - cuestioné ante la intriga de que algo pudiera pasar en aquel lugar prohibido.

Salimos de la biblioteca bromeando y fantaseando con la posibilidad de tener sexo con Namjoon en la oficina y hasta haciendo un trío.

Fuimos a comer al restaurante que Hoseok había mencionado, pasamos la tarde junto a sus amigos Yoongi y Jimin que eran un tanto fastidiosos pero divertidos, nunca perdían oportunidad para recordarnos todas las veces que se hablaba en los pasillos del campus de que nos habían encontrado teniendo sexo en un lugar nuevo, creo que ellos sabían de memoria cada lugar en el que lo habíamos hecho Hoseok y yo, más que nosotros mismos, pero aún con eso la pasé bien.

Pasaron al rededor de tres meses sin ver a Namjoon, incluso cuando iba a casa de Hoseok con la intención de topármelo, creí que debía olvidar el tema de tenerlo a mi merced, hasta que por fin apareció de nuevo por la universidad, esta vez para tomar el lugar de su padre y convertirse en el nuevo jefe.

Lo presentaron en el auditorio frente a todos los estudiantes, maestros y personal que había, se veía aún más atractivo que meses atrás, con un corte de cabello demasiado prolijo y un outfit totalmente negro que lo hacía ver irresistible, camisa de cuello alto, con un abrigo  a su medida que detallaba su cuerpo a la perfección y de la misma forma un pantalón de vestir que le quedaba más que perfecto, parecía un modelo sacado de una revista.

Mi mejor amigo y yo, estábamos en primera fila porque teníamos que subir a darle unas estúpidas flores a forma de bienvenida, ¿por qué nosotros? La respuesta es sencilla... Porque a su padre se le ocurrió y no nos dio otra opción.

Perderte para saber que te amo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora