Perderte para saber que te amo.

28 - Espejo

GABRIELA

Namjoon y el doctor se encargaron de los documentos para que me dieran de alta y unas horas después pude irme, ya que mis padres no estaban en casa, me quedaría con Hobi, mis padres ya habían hablado con los suyos para que pudiera quedarme esa noche y me cuidaran mientras ellos llegaban.

- ¿Te llevo a tu casa? - me preguntó Nam.

- No, mis papás me llamaron mientras estabas arreglando las cosas y me dijeron que vaya a casa de Hoseok, así que puedes irte, muchas gracias por traerme y... Mi papá se encargará de pagarte, lo haría yo, pero desde lo de Jungkook me quitaron mis tarjetas y me dejaron el dinero suficiente para sobrevivir y... - me interrumpió.

- No te preocupes por eso, no es necesario que lo hagan, me alegro de que estés bien al menos, es lo que importa - estábamos incómodos, luego de que le dijera que no tendríamos nada y, la razón era mi supuesto prometido, se puso serio y casi no me hablaba.

- Nos vemos entonces - dije adiós con la mano y comencé a caminar.

- ¿A dónde vas? - preguntó al verme alejarme.

- A buscar un taxi - contesté.

- Creí que tu amigo vendría por ti - negué.

- No, no quise molestarlo y le dije que yo llegaba a su casa - respondí.

- Gabriela, te desmayaste hace unas horas y aún no te ves bien, no puedes irte sola, no voy a permitirlo - dijo.

- Estaré bien - le aseguré.

- Yo te llevo... Además no tiene sentido que te vayas sola si yo voy al mismo lugar que tú, vamos - comenzó a caminar y yo me quedé parada, no quería ir con él - vamos Gabriela - dijo regresando hasta donde me había quedado parada y me llevó de la mano hasta su auto.

Si no tuviera presentes mis propias palabras respecto a lo que dije sobre sus actitudes románticas que eran creadas por mi cabeza, el hecho de que nuestras manos estuvieran entrelazadas en ese momento me hubiera parecido el acto más hermoso del mundo.

Durante el trayecto ninguno habló, ambos teníamos la mirada fija en el camino y cuando menos nos dimos cuenta llegamos a nuestro destino, me ayudó a bajar y me llevó de la mano hasta la puerta de la casa de mi mejor amigo.

- Muchas gracias Director Kim - hizo una mueca al escuchar cómo lo llamé.

- ¿Nuevamente volvemos a las formalidades? - preguntó sin cambiar su expresión.

- Nada nos une más que la relación director y estudiante... Es mejor así... Mi padre irá a buscarlo mañana para pagarle todo... Gracias - puse la clave de la puerta, ya que era prácticamente mi casa y entré.

Por la cámara del pórtico podía ver a Nam parado frente a la puerta sin moverse y de pronto vi que golpeó la pared, no sabía qué le molestaba tanto, si era el hecho de que le dijera que estaba con Jk, que terminara con cualquier tipo de relación que teníamos o que lo llamara Director Kim, pero en cualquiera de los casos no me interesaba saber cuál era el causante de su enojo.

- ¿Qué vez que estás tan concentrada? - la voz de Hobi me  interrumpió, volteé a verlo y nuevamente a la cámara, pero Nam ya no estaba.

- Veía a Namjoon - contesté algo triste.

- ¿Pasó algo entre ustedes mientras estuvieron en el hospital? - asentí.

- Hablamos un poco y está enojado conmigo, o eso creo... Le di a entender que me casaré con Jungkook - confesé.

- Pero no lo harás - me contradijo.

- Y él no debe enterarse, él se va a casar y no tiene intenciones de romper su compromiso - comencé a llorar y Hobi me tomó en sus brazos para abrazarme.