28º-𝗤𝘂𝗲 𝗲𝗹 𝗿𝗲𝗰𝘂𝗲𝗿𝗱𝗼 𝘀𝗶𝗴𝗮 𝘀𝗶𝗲𝗺𝗽𝗿𝗲

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Un día más, Leo se encontraba tirada en el sofá de la sala mientras su amigo miraba la televisión. La chica tenía colocada su cabeza sobre el regazo del chico mientras este jugaba de vez en cuando con su pelo. Los dos solían encontrarse tranquilos en momentos así, y nunca lo habían interpretado como algo extraño. 

Ese día la chica había tenido día libre en el trabajo, y había pasado la mañana con Diego, incluso le había acompañado al gimnasio. Realmente el gimnasio no era lo suyo, era una chica en buena forma, pero el gimnasio no era su sitio, no la gustaba hacer ejercicio en un sitio con más gente y máquinas que realmente no sabía para que servían, prefería hacer ejercicio en su casa, sin nadie más, y gratis... 

Era lindo para Leo volver a pasar tanto tiempo con Diego, el chico se había vuelto bastante cariñoso, cariñoso a su modo, y Diego expresaba el cariño pasando tiempo con las personas y hablando con ellas, viendo series o películas, escuchando música juntos o solo estando en silencio de manera cómoda. Las palabras no eran el fuerte de Diego, pero cuando llegaba a hablar de manera seria, de su boca podían salir los mejores consejos. 

-Que crees que será lo que quiere Smoke? -preguntó ella

-Mm? Que quiere de que?

-Por qué habrá querido quedar esta tarde conmigo?

El chico suspiró y negó con la cabeza

-Realmente te cuesta entender estos temas eh?

-Que? 

-Nada, solo, pásalo bien esta tarde con Smoke, si?

-Nada, solo, pásalo bien esta tarde con Smoke, si?

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El pelinegro se miró al espejo una vez más. Se aseguró de tener el cabello bien peinado varias veces. Si una cosa caracterizaba al chico, era ser realmente ansioso y perfeccionista, tal vez demasiado, pero quería que todo saliera bien. Se había vestido con una camiseta negra sin mangas. Unos pantalones de mezclilla con parches, un cinturón de cuero negro y unas botas negras. Además de varios accesorios como collares plateados, anillos y alguna que otra pulsera. Realmente había hecho su mejor esfuerzo en verse bien aquella tarde. Todavía quedaba una hora para que el pasara a por la chica, pero ya estaba preparado, no quería llegar tarde. 

Fue a la sala, donde estaba Nico sentado viendo Tiktok. Su compañero de piso le miró de arriba a abajo y luego le dedicó una sonrisa

-Te ves bien, tranquilo

-Gracias...

El pelinegro volvió a revisar la hora en su celular, estaba impaciente. Quería ver a la chica, pasar la tarde con ella, verla sonreír, y pasar tiempo con ella. El chico llevaba una mochila con cosas para poder pasar una tarde entretenida. Llevaba cosas básicas como su cartera, sus llaves, su tabaco y su encendedor. Pero también había tomado otras cosas como una linterna, ya que iban a un sitio abandonado y si anochecía no podrían ver bien, unos auriculares por si surgía el momento y el y la chica acababan escuchando música juntos, unos botes de graffiti y alguna que otra cosa más. 

「𝐈𝐓'𝐒 𝐘𝐎𝐔」-𝘚𝘮𝘰𝘬𝘦-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora