Devious Secrets +18 (español)

CAPÍTULO 23

¡Feliz cumpleaños, Kiara!

Kiara

Los rayos de la luz solar entran por el gran ventanal de mi habitación e iluminan mi rostro. La luz me molesta y mis ojos se arrugan dibujando una mueca en mi cara.

Me froto los ojos después de la horrible pesadilla que ha rondado por mi cabeza esta noche como es de costumbre. No me levanto, simplemente me quedo mirando el techo blanco, como si eso fuera a cambiar algo de mi pasado o algo de lo que me depara el futuro.

Hoy es 8 de agosto, es mi cumpleaños, y como cualquier otra persona común, debería de estar supuestamente alegre, mas no es el caso.

Este día para mí no representa más que el inicio de mis pesadillas. Por más que las intento olvidar, no puedo, no soy capaz de mirar al pasado y no odiar ser la persona elegida que tuvo que sufrir de esos tormentos, arriesgando a mis padres para que dieran la vida por mí.

Un hecho que siempre detesté ya que siempre pusieron su vida en riesgo por esa niña de tan poca edad.

El problema siempre fui yo, a pesar de aun no tener explicaciones de mi pasado, siempre supe que yo era la causa de la muerte de mi padre o del casi de mi madre.

Y todo empezó un día como hoy, un día soleado que fue tornándose de color gris hasta sumergirme en la oscuridad que aún a día de hoy, me abruma de vez en cuando.

Me levanto sentándome en la cama y quitándome las sábanas de encima. Giro la cabeza para observar mi mesita de noche y encontrarme un ramo de tulipanes blancos.

En absolutamente todos mis cumpleaños recibo un ramo de tulipanes blancos, exactamente 8 flores de las cuales desconozco su procedencia.

Es un extraño suceso que nunca comprendí, pero que en cierta forma llenan una pequeña porción del vacío que caracteriza mi corazón.

Las agarro y las observo más de cerca. Llevan una nota y la abro para leer lo que hay escrito:

Feliz cumpleaños nº 23, Kiara.

Y abajo de esta hay un corazón dibujado. Mis lágrimas amenazan con salir y las evito a toda costa con una sonrisa que me es inevitable.

Siempre amé los tulipanes blancos ya que representan el amor sincero y la pureza. Son delicadas y tan sencillas que, desde mi punto de vista, las hace extraordinarias.

Las coloco en el florero que ya tenía preparado y guardo la nota con las felicitaciones de otros años.

Veo mi horroroso reflejo en el espejo y deseo no haberlo hecho. Soy un desastre con el cabello desordenado a tal punto que parezco una loca y mi pijama de un conjunto de camisa y pantalón de seda beige algo arrugados.

Alcanzo un peine y me lo paso por el pelo para disminuir su volumen y posteriormente salgo de la habitación en busca de un café para este largo día.

Camino como muerta y dejo de sentir la vida entre mis manos por un momento cuando unos gritos retumban mis oídos.

—¡FELIZ CUMPLEAÑOS, KIARA! —grita un grupo de personas que saltan de sus escondites en el salón.

Un cúmulo de confeti de colores cae sobre mi cabeza y mis oídos amenazan con dañarse por culpa de las matasuegras.

Me cantan todos en conjunto mientras yo visualizo a mis amigos. Está mi madre, quien sujeta un pastel en forma de corazón rojo y con una vela enfrente de mí.

Se encuentran todos mis compañeros de trabajo e incluso visualizo a mis guardaespaldas con gorritos de color dorado en la cabeza.

Renzo mantiene un rostro frívolo y yo no puedo evitar reírme ante la imagen que se muestra delante de mí.