Hazme Pecar | Wandanat

LXX. Ella

– Esto está saliendo muy bien – Dijo Natasha con mucha emoción acercándose a besarla

Yelena y Kate se morían de curiosidad por verla, escucharon un ruido en la cocina, unas cacerolas sonaron con fuerza en el piso, ambas fueron con Natasha y su acompañante, entraron y las vieron recogiendo lo que se había caído.

– Ten – Emitió Lilith poniéndose de pie pasándole lo que estaba en el piso a Natasha

– Gracias – Sonrió ordenando la cocina – Ahora... – Vio a su hermana y cuñada asomándose por la puerta – Bueno... – Se levantó junto a su acompañante – Ya la vieron, es... ella es Maria, sé que escucharon que era Lilith, pero... su nombre real es Maria – La presentó notando que ya había perdido el factor sorpresa

– ¿Maria Hill? – Emitió Kate sorprendida y confundida – ¿Tu amiga del convento?

– Sí – Respondió tomando su mano – Le ofrecí que venga conmigo, no creí que tomaría mi palabra, pero lo hizo – Sonrió ayudándole a quitar su capa – ¿Vamos a comer? – Tomó a Maria de la cintura para ir al comedor

– Claro – Emitió Yelena siguiendo a su hermana, mientras veía a Kate igual de sorprendida como lo estaba ella

La merienda fue amena, Kate y Yelena trataron de no hacer preguntas mientras tanto, hablaban de cosas triviales, Natasha intentaba conducir todos los temas, que conozcan mejor a Maria.

– ¿Quieren saber qué es lo más interesante de Maria? – Emitió Natasha con una gran sonrisa

– ¿Qué? – Preguntó Kate con curiosidad, sentía que había algo más, pero no sabía que era

– Maria no... – Los toquidos de la puerta interrumpieron lo que decía

– Lo siento, permítanme – Emitió Yelena levantándose de la mesa, se sentía muy interesada en lo que sucedía, era cierto que la curiosidad mató al gato

– Hola, vengo para que Joe tome su paseo antes del almuerzo – Emitió Wanda con una sonrisa entrando a la casa – No sabía que estábamos todos aquí... y también... – Se acercó a la mesa viendo a Maria – Años sin verte ¿Cómo estás?

– Bien – Respondió tímida

– ¿Qué haces aquí?

– La invité para una merienda – Respondió Natasha tomando la mano de Maria por encima de la mesa

– Chicas... – Emitió Maria sintiéndose incómoda de repente – Creo...

– No entiendo – Wanda se dirigía a Natasha como si las dos estuvieran solas en el lugar – ¿Tan amigas son? – Señaló sus manos unidas

– Wanda...

– No, ya veo lo que está pasando aquí – Emitió Wanda retrocediendo unos pasos – Kate, Yelena... creí que era la mejor contendiente, pero al parecer estaba alejada de la verdad – Dijo con decepción

– Wanda – Corrió Kate acercándose a ella – Por favor, no lo tomes así

– ¿Cómo lo tomo entonces? Después de saber que no sólo existe Lilith, si no también Maria ¿Con cuantas más estás, Natasha? – Volteó de forma brusca hacia ella – Digo... para que no empiece a salir con una de tus muchas conquistas

– Wanda, por favor... no... – Natasha intentaba hablar, pero la risa de Wanda la interrumpió – No te rías

– Lo siento, lo siento – Dijo intentando respirar – Es que deberías de ver los rostros de tu hermana y Kate, también Maria que oculta el rostro entre sus brazos