De pequeña odiaba las pesadillas, me dejaban un mal sabor en la boca y terminaba llorando mares por horas. Así que al día siguiente estaba desvelada, con mucho sueño y grandes ojeras. Y saba la casualidad que nunca era la única, porque siempre que tenía una pesadilla Hyejoo también, así que llegaba al instituto igual que yo o iba al palacio en las mismas condiciones.
Hubo una temporada en la que por un terremoto la casa de los Son se vio perjudicada, mis madres les ofrecieron el palacio y lo aceptaron, así que por casi dos meses viví con Hyejoo, ella dormía junto en la misma habitación en la que lo hace ahora.
Pero cuando yo salía al balcón para tomar aire, ella ya estaba ahí. Podía ser media noche o de madrugada, ella ya estaba ahí. La primera semana que concordamos, no dijimos nada, cada quien se quedó en su balcón, pero tras pasar los días empezábamos a conversar, nada trivial pues yo le comentaba cosas del universo y ella me mostraba las constelaciones que encontraba. Mis madres me regalaron un telescopio por mi obsesión de ese momento con las estrellas, así que el día que me lo pusieron en el barandal la invite a mi balcón. Cuando nos quedábamos dormidas juntas no me daban pesadillas, a ninguna ya que nos despertabamos con un humor muy bueno. Y cuando se fué, las pesadillas también.
~🗡️👑~
- Chae... ¡Está regresando! -los gritos de Jiwoo me desconcertaron.-
- No grites, me duele la cabeza. -intente abrir los ojos.-
- ¡Hija! -senti un abrazo.-
- ¿Por qué todas actúan así de raro? -me acomodé en la cama.-
- ¿No recuerdas nada? -negue.-
- Te desmayaste el día del orfanato, llevas una semana dormida.
- ¿Qué? -me agarré la cabeza.- ¿Y Hyejoo? ¿Por qué no está aquí?
- Ella también se desmayo, hija, está en la otra habitación. -la Vi perpleja.-
- Quiero ir a verla, necesito ir a verla.
- Primero te debe de ver el doctor, luego hablaremos.
- No, ustedes no entienden. Debo verla.
La mirada que me hicieron me lo dijo todo, otra vez estaba roja. Solté un suspiro y luego ví que el doctor entró, el cual me dió la misma mirada.
- No es nada médico así que no se espanten. -el doctor les indico a mis mamás las cuales asistieron.-
Me hicieron pequeños y cortos exámenes, solo era para ver si no había perdido mi motricidad o la memoria. Cosa que no pasó.
- ¿Ya puedo ir con ella?
- Primero dinos que es esto de que se ponen de colores. Primero era verde y ahora son color rojo y azul... ¿Ustedes están consumiendo algo? -Seulgi se puso de brazos cruzados.-
- ¿Qué? No. -solte un suspiro.- es difícil de explicar.
- Pues por algo debes empezar.
- Entiendenos, estamos preocupadas por ti, hija. -Jiwoo tomo mi mano el forma de apoyo.-
- Fuimos con una chamana luego de que el doctor nos dijo que no era algo médico, pero ella nos explicó que Hyejoo y yo somos almas gemelas imposibles. Nos hemos amado en muchas vidas y nunca terminamos juntas, siempre alguien muere o nos separan. El color se llama aura, originalmente es verde pero la chamana nos dió unas piedras para que no pasara cada vez que nos acercamos, pero hay veces que ni eso nos funciona. -desvie la mirada.- cuando nuestras almas sienten esa necesidad de estar juntas, luego de tanto tiempo estar reprimidas y por décadas sin poder unirse, se manifiesta y hace que salga esa aura.
Ninguna dijo nada, ambas se quedaron calladas. Podía notar una sonrisa en la cara de Joohyun, una sonrisa que con los segundos era más y más grande.
- Lo sabía. -me agarro mi mano libre.- desde el primer momento que estuvieron juntas, yo lo sabía... Bueno ambas.
- Solo que no pensábamos que era tan profundo. -Seulgi me sonrió.- tienes derecho de amar a quien quieras, cariño. Nosotras no nos interpondremos entre su relación, si es que tienen. Pero no debiste de haber aceptado la propuesta de John.
- No lo hice, lo abrace solo para que la prensa no pensara mal. Tenía a todos viéndome y no podía actuar en falso. Creo que se hubiera visto peor escapar con Hyejoo, sabiendo que John iría atrás nuestra. Capaz Hyejoo le daba un golpe, eso si hubiera estado peor.
- ¿Entonces no aceptaste ser su Omega?
- ¡No! Me agrada John, tengo que decir que me llegó a gustar un poco... Pero cuando pase más y más tiempo con Hyejoo, simplemente se fueron dando los sentimientos, que al parecer ambas reprimimos durante muchos años. Además ya no puedo estar lejos de ella, miren lo que pasa cada vez que nos alejamos.
- Tienes un punto, pero bueno, todo eso lo hablaremos en su momento. -les asentí.- ve con ella.
- Yo la llevo. -Jiwoo tomo una silla de ruedas y me acompaño hasta la otra habitación, la cual estaba con sus amigas, padres, sus hermanos, su cuñado y su sobrino.-
- Princesa. -me dieron una reclinación.-
- Señores Son, yo en verdad espero que Hyejoo se recupere pronto.
- Lo sabemos. -me sintieron.- las dejamos a solas, para que puedan tener privacidad.
En lo que todos se iban, note que aún estaba roja y cuando voltee a verla, confirme que ella también estaba azul. Le pedí a Jiwoo que me acercara lo más que pudiera, eso hizo y sin decir nada salió del cuarto.
No sé me hacia normal verla asi, tan vulnerable hacia todo. Tome su mano y le deje unas cortas caricias antes de pasarme a su cabeza y a delinear su cara, nunca había tenido la oportunidad de verla así, desde que regrese no hemos dormido juntas, pero sabía que era estar abrazada en la cama con ella. El espacio en la camilla era bastante, así que me subí, me recosté a su lado, la abrace por el abdomen y encaje mi cabeza en su cuello, mientras una de mis piernas estaba arriba de las de ella.
- Hye, cuando despiertes, quiero hacer las cosas bien contigo. No sé por qué teprimi durante tanto tiempo estos sentimientos tan lindos y puros hacia ti... Bueno, si sé, pero ese no es el punto. El punto aquí es que te quiero, te quiero demaciado, tanto que incluso estar a una habitación de distancia me duele. -agarre una de sus manos y entrelace nuestros dedos.- investigue lo de las almas gemelas, y este amor puede ser muy peligroso, porque podemos llegar a sentir lo que siente la otra, además de la dependencia que se forma. Pero igual, me gustaría intentarlo, estar abrazadas en todos lados, besarnos afuera de nuestras habitaciones, dormir juntas, ir por todo el palacio de la mano... Me muero por eso, pero necesito que despiertes para hacerlo, ¿podrías hacer eso por mí?
- Yo haría cualquiera cosa por ti, Chae.
- ¡Hyejoo!
ESTÁS LEYENDO
Entre Espadas y Coronas //Hyewon//G!P//
Fiksi PenggemarChaewon odia que la vida las pusiera tan cerca, le molesta su existencia en su vida y como depende de ella para todo. Detesta verla todos los días, más cuando le sonríe con esos labios tan ¿Besables? Y esa sonrisa tan ¿perfecta? Pero, Chaewon miente...