"GRAL ULISES PRATS"

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Jonathan

Estamos en posición, tengo una sensación de que algo no cuadra.

Sac está muy alterado, mi amigo seria padre, estaba casado con la mujer que ama y está aquí.

Por mi su mejor amigo en vez de estar gozando su luna de miel, esas son cosas que nunca tendrán pago

Me observa y le asiento con la cabeza, un grupo de compañeros cruza el área y se desplazan sigilosamente hacia el área sur, es donde está la actividad del cargamento.

El otro grupo de 15 en donde estamos nosotros nos trasladamos hacia el área norte donde tiene que estar despejado para retirar a las mujeres.

Y efectivamente esta todo despejado, veo a lo lejos el lugar donde nos indicaron estarían las ellas, caminamos entre los arbustos, la puerta está abierta.

Me quedo quieto no podía correr tenemos que seguir el plan, veo a Sac impacientarse, escuchamos la balacera del otro lado la misión.

Ese lado ya está en pleno auge, ese es nuestro aviso de continuar, nos desplazamos hacia la pieza precaria, entró en ella está muy oscuro, prendo la linterna y veo dos cuerpos masculinos desangrados, me agacho tocó sus pulsos ambos están muertos.

Le hago seña a Sac para que continuemos, mi rabia ya está en su máxima ebullición, antes de salir escuchamos los disparos más cerca.

Fuimos descubiertos, nos ayuda la oscuridad de esta área.

Desenfundamos las armas y disparamos no vemos de dónde vienen los tiros, nuestros otros compañeros disparan desde los árboles donde están cubiertos.

Miró a Sac y a mi otro compañero, salimos poniéndonos de espalda los tres formando un triángulo, cuando estamos llegando a los árboles mi compañero cae la bala le da donde el chaleco no cubre.

Reconozco la dirección de la bala y veo que Sac es su próximo objetivo, faltando tan poco solo puedo actuar y defender a mi amigo que se queda quieto cuando ve el puntito verde que se dirige a la altura de su corazón me mira a los ojos y sin pensar mi tiro por el lanzándolo al suelo.

Sac dispara y da directo al francotirador y me toma en brazos, me recorre un frio en el cuerpo.

- Jonathan amigo no amigo, mírame porque lo hiciste maldita sea amigo – dice llorando.

– Llámalo ahora – le digo sintiendo la humedad bajando por mi brazo.

– Si – dice tomando mi celular, marca y lo lleva a mi oído.

– No están – exclamo con la adrenalina en mi sangre.

.........- están a salvo amigo y tú – dice.

Pero ya estoy en los cielos, ella ya está bien.

– Gracias – contesto.

Cierro mis ojos buscando un poco de paz, escucho los gritos de Sac y me hundo en una oscuridad total.

+++++++++++++++++

Nayeli

Nos hundimos completamente en el agua, mi cuerpo ya no da más.

La pérdida de sangre más la adrenalina que está dejando mi cuerpo.

Parece que estoy volando una paz inunda mi alma, me estiran del brazo y salgo a la superficie, soy arrastrada a la orilla, soy apenas consiente.

Me presionan el pecho una, otra vez y el aire vuelve a mis pulmones, me levanta y empiezo a toser, saco el agua que tengo dentro, un dolor insoportable en mis pulmones, abro mis ojos y veo a Sofia con una media sonrisa.

– Levántate, llegamos muy lejos para caer ahora – me reprende Sofía.

Que irónica es la vida, la que me daba fuerza ahora era ella, ese es el trabajo en equipo.

– Vamos y gracias – digo levantándome.

Escuchamos como dos personas caen al agua, maldigo a esa mierda de Rayner.

Comenzamos a correr y cuando estamos llegando a la carretera 4 camionetas paran frente a nosotras, se bajan varios hombres vestidos de negro.

No sé si llorar o sacarle un arma y pegarme un tiro, veo a Rayner acercarse, Sofía tiembla y ya no tenemos escapatoria.

-Por dios Nayeli, nunca más le prometo algo a Jonathan, ustedes dos en minutos casi acaban conmigo, lo que el grupo delta no hizo en 4 años – dice mientras se dirige a mí, pero sus ojos están puestos en Sofía.

No entiendo nada, se me acerca y hace señas con el dedo a los demás, uno de los hombres se acerca a el.

- A su orden Gral. – le dicen con un saludo militar.

– Rompa fila cabo – Rayner se dirige al hombre y veo a los demás aligerarse.

Otros dos hombres se acercan con una sonrisa de suficiencia y completamente mojado, moviendo la cabeza de forma negativa. Rayner se acerca a mí a y Sofía y con una sonrisa se presenta.

– Me presento Srtas. Gral. Ulises Prats, encargado de las fuerzas especiales del narcotráfico de personas y estupefaciente, a sus órdenes – me dice Rayner.

Veo a Sofía desmayarse y yo me quedo sin saber que decir.

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