Conociendo A Jonathan (+18) Ya esta en Amazon

¡LANZARSE AL VACÍO!

Katherine.

Este hombre no tiene remedio, intento alzar mi cabeza para buscar a Rogelio y no lo encuentro en ningún lugar, Jonathan me baja lentamente... me abre la puerta del Mustang, trato de enfocar mi mente, lo miro de forma interrogante.

– ¿Jona donde esta Rogelio? -le pregunto, con temor a su respuesta.

– Me encanta como suena Jona en tus labios- contesta acercándose para darme un beso posesivo, está queriendo distraerme de la pregunta, me separo de él y le señalo con el dedo.

– ¿Dónde está Rogelio? - vuelvo a preguntar, lo veo poner su cara de pícaro, con una media sonrisa formando un minúsculo casi imperceptible hoyuelo en la barbilla.

– Se lo llevo la grúa –contesta.

– Perdón... - creo no entender su respuesta.

– Se lo llevo la grúa, no le dio tiempo a buscarte y como yo estaba patrullando por la zona, me ofrecí a salvarte- porque me parece que la realidad es muy diferente de su explicación.

- No lo veo muy claro, pero como eres un mentiroso no me contaras la verdad, solo dime que no lo pegaste – me mira con cara de ofendido.

– Haber Srta. Cuando te he mentido – lo dice como si fuera la mayor ofensa a su persona, enserio quiere que le enumere las veces que me ha mentido.

– Anoche me dijiste que entraste por la ventana, omitiste la parte de a ver... Si ya lo tengo omitiste decir ¡tengo una llave! – le digo mirándolo con desconfianza.

– ¡Perdóname Kate si a esa hora de la madrugada no coordino mis respuestas!

– Y sin contar de la nota y que estas con el Mustang y no la patrulla.

– A ver qué puse que fuera mentira – lo dice poniéndose en posición de defesa, extiende su mano frente a mí y comienza a enumerar –

-Uno- lo dice estirando el dedo- roncas - será descarado.

– Eso no es cierto –me mira interrogante y hace una afirmación con la cabeza hasta empiezo a dudar si ronco.

– Ok Jonathan está bien tienes razón, ahora solo dime que le paso a Rogelio –

– La grúa llevo su auto, para que lo deja en los lugares que no están permitidos y dejemos de hablar de él y monta al auto que hay algo que quiero mostrarte – subo al auto no me creo mucho su historia, pero lo dejare pasar.

– Necesito que pasemos por casa para cambiarme – pido como un favor.

– Puedes quedarte desnuda si quieres – no podía dejar pasar su oportunidad de ponerme en una situación incómoda. Mueve sus hombros como si fuera una opinión inocente.

– En realidad preferiría cambiarme en casa si te parece bien y ¿a dónde vamos Jona?

– Me gusta cuando me llamas Jona, quiero mostrarte un lugar que te encantara

– Una sorpresa - lo digo con absoluta irritación cruzando mis brazos en mi pecho.

- Si, pero antes quiero darte algo – para el auto saca algo del costado del conductor y me pasa una bolsita negra de seda me lo pone en la mano.

–Solo quiero pedirte un favor Kate, no lo abras aquí... ábrelo a la noche cuando estés sola en tu dormitorio si – me quedo totalmente intrigada sin saber que decir, pero en su mirada veo determinación y suplica.

- Está bien – le digo sonriente.

–No me estarás dando veneno verdad o algo por el estilo –pregunto en burlonamente.