THE RISE OF THE KINGDOM OF THE SUN

CAPÍTULO 52.- primer fragmento

Liana tenía la boca abierta, totalmente abierta, Bael empezaba a impacientarse porque no salía de su estupor.

Si, tenía que reconocer que la primera vez que vio el lugar su cabeza voló, pero él era semidemonio. Las cosas raras y de otro mundo eran su pan de cada día.

—Esto es...

—Si, lo sé.

—Bael, hay fuego danzando en el suelo y todos están encima de una enorme roca voladora.

—A mí me salen alas y cuernos Liana —dijo Bael con molestia—, ven, los demás te explicaran que es este lugar. Yo no tengo la paciencia.

Bael alzó sus alas y le elevó al altar lunar. No esperaba ver a Theo abrazando y consolando a Odette que parecía que se iba a morir, después empezó a sumar dos más dos y se dio cuenta de lo que pasaba.

—¿Lo rechazaste? —preguntó Bael, aunque ya sabía la respuesta.

Odette soltó un sollozo más fuerte y Theo tuvo que sostenerla bien para que no cayera al suelo.

—¿Tú también lo sabías? —preguntó Liam.

—Me enteré esta misma noche, Noel parecía que se había tomado todo un arsenal de bebidas energéticas y lo acorrale para saber que pasaba —Bael cerró los ojos un momento pensando en Noel—, debería ir con él. Debe estar destrozado.

—Aquí no pasa el tiempo, así que espera que terminemos aquí.

—¿Cómo que aquí no pasa el tiempo? —Liana frunció el ceño y los miró exasperada—, ¡¿Alguien me puede explicar que es este lugar y porque Odette está llorando como loca?!

—¿Qué está pasando? —Gabriela llegó junto a todos los demás—, ¿Por qué lloras Odette?

—Noel le propuso matrimonio a Odette y esta lo rechazó —explicó Liam.

—¡¿Qué?! —Estefan llegó justo para escuchar la explicación de Liam—, ¡¿Pero si son mates?!

Odette prácticamente gritó de dolor y los demás fulminaron con la mirada a Estefan.

—Oh... cierto —Estefan entendió todo—, lo estaría condenando al pobre.

—¿Condenando? —Liana miraba confusa a todos—, ¡¿De qué me estoy perdiendo?!

—En caso los demonios nos ganaran, Bael tiene que sacrificar a Odette en el altar lunar para evitar que la preñen y nazca el anticristo de ella —dijo Estefan con simpleza, Liana lo miró consternada y los demás lo miraban sin creer su falta de tacto—, ¿Qué?, ¡Es la verdad!

—¡¿Odette dará a luz al anticristo?! —exclamó Liana.