CAPÍTULO 59.- segundo fragmento

2.4K 430 57
                                    


Junior sonreía de un lugar a otro disimulando una gran sonrisa, la noche era espléndida, cada rincón de ese lugar parecía alumbrado por una luz mágica. Las personas reían, otras bailaban y algunas disfrutaban del maravilloso buffet.


El vampiro sabía que podría comerse la mitad de la mesa o beber todo el magnífico vino y jamás saciaría su hambre y sed. En aquel lugar se celebraba un gran evento benéfico. Grandes personalidades de todo Francia estaban presentes, incluyendo al maldito presidente humano del país. Había otros humanos en el lugar y Auguste les había advertido, rogando en todo caso, que mantuvieran sus poderes guardados para sí mismos esas noches.


La mayoría de los humanos con poder sabían la existencia de los hombres lobos, más que nada porque las grandes manadas eran tan ricas y poderosas que la mayoría de los humanos de la élite estaban conectados con ellos, bien por negocios o por amistad. Sin embargo, había algunos humanos que aún no sabían u otros que la existencia de príncipes híbridos con superpoderes. Así que aquí estaba Junior, ahogado por el olor de la sangre de los humanos presentes y amarrado para no hacer nada más que sonreír complacientemente.


—¿Y a ti qué te pasa? —Angel llegó a su lado con su propia copa de vino—, Auguste y Liana están tan ocupados que no hay nadie que evite que tomemos alcohol.


—¿Cuándo nos ha detenido ser menores para tomar en el Reino? —bufo Junior.


—Hablo de hacerlo en público —Angel miro de nuevo a Junior—, ¿Por qué pareces molesto?


Junior suspiró intentando calmarse.


—Solo estoy algo cansado —respondió el vampiro ganándose una mirada incrédula de parte de su primo—., bueno, este lugar está muy cerrado, hace calor y eso hace que el olor de la sangre de los humanos sobresalga mucho. Es como entrar a una panadería y te golpee el olor fuerte a pan horneado en la nariz.


Angel se preocupó de inmediato.


—Salgamos a los jardines entonces —Angel hizo que se acercaran a una de las puertas de vidrio que daba salida al hermoso jardín.


Entonces antes de que salieran, Angel fue interceptado por una jovencita con la cual él había conversado antes y que ahora pedía el baile que había prometido.


Junior vio que Angel miraba con interés a la chica, pero que estaba decidido a irse con él.


—Vamos Angel, ve y diviértete —lo empujo Junior—, yo iré a un lugar apartado de todos y descansaré un rato. Puedes alcanzarme después.


—Tal vez encuentres a Belial y a Timothee —asintió Angel—, te alcanzaré dentro de un rato.


—¡Demórate todo lo que quieras! —bromeó Junior cuando se alejó con la chica—. ¡La noche es joven!


Junior salió un poco más contento de la gran fiesta y sintió un alivio al recibir el aire fresco de esa hermosa noche en su cara. El olor de los humanos aún se sentía, pero con menos intensidad. Camino por el jardín hasta llegar a un laberinto de arbustos. No era tan hermoso como el laberinto del palacio, ni tenía esas hermosas rosas rojas y blancas que hubiera aliviado su olfato con su delicioso aroma, pero algo era algo.

THE RISE OF THE KINGDOM OF THE SUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora