CAPÍTULO 58.- segundo fragmento

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Jaime tocó el puente de su nariz para reunir paciencia suficiente. A pesar de los años, seguía sintiendo que estaba alrededor de niños incompetentes.


Alan se había caído de su asiento para reír con fuerza.


Gerard lo miró como si no estuviera sorprendido de aquella burla.


—Su sobrino también se rio mucho, por lo que me contó Joon —explicó Gerard—, debe ser familiar lo de burlarse de las desgracias ajenas.


—Explícame todo a detalle —Jaime fulmino a Alan mientras este seguía riéndose a carcajadas.


Gerard obedeció y empezó a contarle todo lo que pasó exactamente en Corea desde una perspectiva diferente. Él ya le había dado un informe a Jaime sobre sus tareas como infiltrado, pero solo mencionó a Ji-eun como un móvil para llegar a su objetivo. Ahora le explico cómo evolucionó con ella y como resultó todo con Gerard con una prometida y un futuro hijo.


Porque si Joon se había adelantado a que siquiera él le preguntara a Ji-eun si quería casarse, él empezó a organizar todo para que se casaran en Corea antes que se notara más el embarazo.


Se podría decir que Ji-eun estaba encantada con la idea, saber que contaban con la liquidez ilimitada de Joon para organizar una gran fiesta para restregárselo a su familia y amigos, la hacía saltar de la emoción.


Gerard no tuvo el corazón para decirle que era muy peligroso casarse a lo grande sin que él supiera que iba a ser de ellos.


—Y dime Gerard —Jaime juntó sus manos sobre su escritorio—, ¿Cómo entran una esposa y un niño a todos nuestros planes?


Gerard se tensó por completo, hace años que no veía esa mirada calculadora y fría dirigida hacia él.


—Ay vamos... —Alan se recompuso de a pocos—, creo que este payaso tiene el derecho de echar una cana al aire.


—Si no vas a hacer serio, es mejor que te vayas —Jaime miró amenazadoramente a Alan.


—Siempre sentí que habíamos estafado a este idiota —Alan ignoro a Jaime—, yo hubiera matado a esos vampiros, aunque no hubiera trato. Gerard ha sido de más ayuda de lo que nosotros lo fuimos para él. Creo que tiene derecho a formar su propia familia.


Jaime resopló cansado.


—La irregularidad es lo que me molesta, se supone que ahora eres la cabeza del grupo más importante de los cazadores. ¿Cómo vas a explicar que tienes un hijo y una esposa?, la cual conociste en una misión para un miembro de la realeza de los hombres lobos. Eres perfecto para el puesto porque hemos trabajado por años en tu tapadera de cazador errante. Ahora tendrás una debilidad que puede desmoronar todo lo que hemos trabajado.


—Lo sé —Gerard frunció el ceño—, sé que he puesto todo en peligro por mi descuido.


THE RISE OF THE KINGDOM OF THE SUNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora