Capítulo 28

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Ambas estaban ya vestidas, Regina llamó a Kat para cancelar el almuerzo explicando brevemente la situación y esta entendió perfectamente y le prometió avisar a Mal para que ella no tuviese que preocuparse.

-¿Vamos?- Preguntó Emma señalando su coche.

-¿Lo has podido arreglar?- Preguntó Regina sorprendida, la rubia no le había contado nada.

-Así es. Parece que esta es mi semana de suerte.- Contestó Emma dándole un dulce beso en los labios.- Quizás debería de comprar un cupón de la lotería.- Espetó abriéndole la puerta a Regina.

-Siempre tan bromista.- Dijo Regina sentándose en el coche.- ¿De verdad esto es seguro?- Preguntó mirando alrededor.

-Claro que sí.- Contestó cerrando la puerta para subir a su lado.

El viaje se hizo de manera amena. Emma monopolizaba casi toda la conversación teniendo la total atención de Regina que disfrutaba enormemente escuchándola hablar. Ponía tanta pasión en todo lo que hacía y decía que era motivador estar a su lado, las ambiciones de la rubia eran tan altas que demostraban la gran persona que era.

-Me gustaría pasar a ver a mi tía.- Dijo Regina rompiendo el silencio que se había instaurado cuando una canción se escuchó en la radio.

-Claro, me parece bien.- Aseguró Emma. – Si quieres podemos comer con Jackie y después pasamos la tarde con tu madre y con tu tía.- Explicó la rubia.

-¿No quieres ir sola?- Preguntó entonces Regina.

-Me gustaría que estuvieses conmigo, presentártela y que os conozcáis. Hemos estado hablando y ella también desea conocerte.- Aseguró entonces Emma.

-Entonces me parece perfecto.- Dijo la morena cogiendo una de las manos de Emma mientras con la otra llevaba el volante.

M&S

Acababan de llegar a Boston, Emma metió la dirección del restaurante en su móvil y este las llevó sin ningún problema al lugar. Regina conocía poco la ciudad aunque solía visitarla los veranos en los que conseguía sacar algunos días de vacaciones.

-Es bonito.- Aseguró Regina cogiendo la mano de Emma para entrar en el restaurante.

-Así es.- Dijo la rubia.- Jackie viene de camino, me acaba de mandar un mensaje.- Aseguró enseñándole el móvil.

-Podemos ir cogiendo mesa.- Propuso la alcaldesa entrando con la rubia en el restaurante.

El metre que allí había las llevó a una mesa y les tomó nota de las bebidas mientras esperaban a Jackie. Ambas charlaban tranquilamente cuando una mujer se acercó a la mesa.

-¿Regina Mills?- Preguntó al ver a la morena.

-¿Samantha?- Preguntó Regina que no podía creérselo.- ¿Qué haces aquí?- Preguntó levantándose para darle dos besos.

-Trabajo aquí.- Contestó esta.- Chef.- Añadió después.

-¿Dejaste ciencias políticas?- Preguntó sorprendida.

-Sabes que no era lo mío.- Contestó esta.- Tú parece que sí conseguiste llegar a lo más alto, he leído sobre tu éxito en Storybrooke.- Dijo contenta.

Emma comenzó a sentirse incomoda, notaba como ambas habían sido algo más que amigas y los celos se estaban apoderando de ella. Carraspeo para hacerse notar.

-Perdona, que falta de respeto.- Dijo Regina tendiéndole la mano a Emma para que esta la cogiese.- Esta es Emma, mi pareja.- Añadió mostrándole una gran sonrisa.

-Encantada.- Contestó cogiéndole la mano.- Me alegra haberte visto, Regina. Te traeré un menú especial.- Dijo mirando a ambas.- Ahora tengo que irme, seguro que los cocineros están como locos.- Añadió girándose para irse.- Por cierto, hacéis una bonita pareja.- Espetó marchándose.

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