🍂Capítulo 3 • Parte 1🍂

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Hospital

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Hospital

Todos los que estaban en la oficina se fueron al sanatorio también, pero minutos después llegaron Tania, April y Marcus.

—¿Cómo te encuentras? —le preguntó su cuñada sentándose a su lado.

—Un poco sorprendida, no creí nunca que fuera a hacer semejante idiotez.

—Sinceramente nos quedamos perplejos cuando papá nos comunicó lo que había pasado.

—Más gente innecesaria llegando —acotó Summer enojada.

—Cállate —le dijo su hermana—. Mejor cierra la boca si no quieres que te dé una cachetada para que dejes de hablar —expresó mordaz sin dejar de mirarla a los ojos.

—Solo hablas así porque estás respaldada por todos ellos —los señaló.

—¿Ni siquiera te preocupa tu madre para saber si se salva? Sigues tan ardida que no frenas nunca —le contestó con enojo.

Autumn se puso de pie, caminó pocos pasos hacia el bidón de agua que tenían para beber y cargó un vasito hasta casi el borde, cuando regresó se lo tiró en la cara a Summer. La mujer quedó sorprendida y se puso de pie escurriéndose el agua que le chorreaba.

—A ver si te calmas un poco y bajas esos humos, no te quiero escuchar más.

—¡Estúpida! —gritó y un guardia le pidió que dejara de gritar porque estaba en un hospital—. Me largo de aquí —se quejó y caminó hacia la salida.

—No pienses que irás a la casa, Summer —le advirtió su padre.

—¿¡Dónde entonces!?

—Señorita, deje de gritar porque me veré obligado a arrestarla —le respondió el guardia.

—Oficial, ¿me haría el favor de dejarla en un motel cerca de aquí? —le pidió al hombre—, aquí tiene dinero para pagar su estadía.

—Avisaré a una patrulla para que la lleve.

—Póngale las esposas por si intenta escaparse, porque ya lo intentó una vez.

Summer no daba crédito a lo que estaba escuchando de la boca de su padre.

—Te desconozco.

—Tú y tu madre han cambiado, solo para tener más que los demás, las únicas equivocadas han sido ustedes —le contestó y luego miró al oficial—, por favor, llévesela.

El guardia sacó las esposas y le pidió que pusiera las manos por detrás, forcejeó, pero al fin pudo ponérselas y se la llevó.

—Cuando regrese le avisaré dónde la dejé.

—Gracias.

El pequeño escándalo mermó allí y todo quedó en silencio, pero con algunos murmullos de personas que estaban en sus charlas.

Unos minutos después el médico salió de la sala de operaciones y se acercaron a él para saber cómo había salido todo. Entre varias cosas que se hablaron les comunicó que habían podido estabilizarla y que era mejor que descansara por aquella noche porque no había de qué preocuparse ya que le estaban suministrando sangre porque había pedido demasiada.

El médico los dejó y continuó con su labor.

—¿Por qué no se van a descansar? No son ustedes quienes tienen que quedarse aquí —comentó Anthony.

—Lleva a tu madre y a April a la casa, Marcus, yo me quedaré un rato con Anthony —le dijo Richard—. Ustedes también, váyanse a descansar.

—¿Estás seguro? ¿No quieres que me quede para acompañarlos? —preguntó Colin.

—Sí —asintió con la cabeza—, estoy seguro, váyanse.

—De acuerdo, cualquier cosa nos llamas —le contestó su hijo.

Ambos se sentaron en las sillas uno al lado del otro y a raíz de un tonto comentario, comenzaron a hablar de anécdotas, el pasado y la amistad que tenían, y que esperaban los dos tenerla de nuevo como antes.

Otoño 1 y 2 - {Bilogía: Romance Otoñal}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora